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Antes de poner rumbo a ‘La isla de las tentaciones’ y de presentarse a la audiencia y a Ismael como una auténtica princesita, Mimi se dejó ver por el programa de Cuatro ‘Ven a cenar conmigo’ en 2018, donde dejó al descubierto sus habilidades culinarias y algún que otro secretillo más. No solo demostró que sabía desenvolverse entre fogones, también enseñó su casa… ¡y presentó a su novio!
La ahora participante de ‘La isla de las tentaciones’ participó en el programa gastronómico de Cuatro hace casi dos años y compitió contra un grupo de comensales de lo más variado. Se presentó como “una persona muy camionera y a la vez muy cuqui” y esta última cualidad la dejó clara en cada uno de sus platos.
Los nombres que eligió para bautizar sus creaciones culinarias fueron de lo más dulces y representaban a la perfección su personalidad de ‘princesita’. Los ‘Saquitos de sorpresa llenos de amor’, que en realidad eran de morcilla y brandada de bacalao; la ‘Explosión de mar y montaña, o albóndigas y las ‘Delicias de Mimi’, que, en realidad, era una macedonia, fueron los platos que cocinó para su propuesta.
La situación sentimental de Mimi ha cambiado mucho en estos dos últimos años. Si en ‘La isla de las tentaciones’ la hemos visto como una soltera muy interesada en Ismael, en ‘Ven a cenar conmigo’ nos descubrió que estaba de lo más enamorada de su chico y que lo había dejado todo por amor.
“Fue un flechazo a tope”, aseguró y explicó que ella era de Barcelona, pero que, debido a la situación laboral de su chico, decidió mudarse con él a Madrid. Para ella el amor lo era todo y aseguraba que después de haber besado “muchas ranas” por fin había llegado su “príncipe”
En ‘Ven a cenar conmigo’ es costumbre que algunos de los comensales espíen a fondo la casa del anfitrión, algo que agradecemos muchísimo, porque ahora, dos años después, podemos saber cómo es Mimi en pareja.
La habitación estaba llena de cosas que hacían referencia a la relación con su novio. Había un cojín en el que estaba escrita la frase “Todo empezó un 8 de marzo” y en otro en el que estaba el hashtag que habían creado para ellos “#Madridporamor”. Además, había papeles por todas partes en los que se leían ‘te quieros’ y ‘te amos’ en cantidades ingentes.
Era una habitación que respiraba amor por todas partes, pero, entre todas las cosas, hubo una que llamó la atención sobre todas: un libro en el que Mimi y su novio apuntaban todas sus cosas románticas y picantes. En él podían leerse cosas como “Me encantaría besarte bajo la luna” o “Tienes un culo como para comerse una paella o un cocido en él”… ¡Pura poesía!
Ni su timbre de claxon de camión, ni sus platos de autora y ni siquiera su fin de fiesta, en el que puso a sus rivales a cocinar crepes, consiguieron convertirla en la ganadora de la semana en ‘Ven a cenar conmigo’ y tuvo que conformarse con la tercera posición. Ahora solo queda esperar a saber si tendrá más suerte en ‘La isla de las tentaciones’ o si se marchará a casa tal y como llegó.