El hambre cada vez hace pasar más estragos a los concursantes. Olga Moreno protagonizó uno de los momentos más comentados de la edición al robarle comida a su amiga Melyssa Pinto. La superviviente argumentó que ése era un ejemplo de cómo el hambre podía llevarte a hacer cosas inimaginables.
Ahora Melyssa Pinto ha tenido un bajón muy grande por algo que nunca hubiera pensado. Algunos de sus compañeros bromearon con darse un festín abriendo latas de comida y repartiendo grandes dosis de aceite. Ante sus comentarios, Melyssa estalló en un ataque de ansiedad pensando que la comida se iba a acabar.
"Yo también quiero pero luego no quiero volver a pasar hambre. Estoy harta ya. No quiero más. No puedo más. No quiero pasar hambre. Igual exagero pero... No es por el aceite. Tengo tanto miedo de que al día siguiente pase hambre. Ni quiero pasar hambre ni aquí ni fuera nunca más", dijo entre lágrimas.