Dinio García es un hombre completamente renovado y así lo ha demostrado tras su paso por 'GH VIP'. El pasado jueves, el cubano se convertía en el tercer expulsado del 'reality' y decía adiós a su gran sueño. Sin embargo, la vuelta a casa no ha sido tan dura para él, que se ha reencontrado por fin con su adorada mujer Milena y su hijo de cuatro meses, "que le han salvado la vida".
El ahora exconcursante de 'Gran Hermano' ha concedido una entrevista para 'Lecturas' en la que ha hablado de su dura infancia, su historia con Marujita Díaz, su infierno con las drogas, su polémica con María Lapiedra y su reciente paternidad, que no ha sido un camino de rosas.
Tener a Dian les costó 22 meses de ardua lucha. Milena tuvo que hormonarse a causa de los espermatozoides con malformaciones del padre. "Yo tenía muchos problemas y me puse en tratamiento. No podía tomar ni una copa de alcohol, nada. Ella se hizo dos ciclos in vitro y es muy duro. Lo hizo por mí, por amor", ha explicado Dinio, narrando el comienzo de esta historia que, tras varios abortos espontáneos, ha tenido un final feliz.
Ahora, Milena y el cubano han formado una preciosa familia, pues ella es madre de un niño de 7 años y él tiene uno de 15, fruto de su primer matrimonio con Elodie Mansion. "Nunca olvidaré el día que conocí a su hijo. Fuimos al colegio y el niño ya dijo en el cole: '¡Ya tengo papá!'. Mi hijo mayor se lleva muy bien con él", ha narrado el exconcursante del reality de convivencia, que ha presumido de lo bien educados que tiene a sus retoños. "El hijo de Milena era muy indisciplinado, ahora no. Lo eduqué Me llama 'papá Dinio'".
Además, en esta entrevista ha tenido la oportunidad de narrar los episodios más duros de su vida. Aunque recuerda que tuvo una infancia muy feliz al lado de su abuela, el ex actor porno tuvo que incorporarse al mundo laboral a una pronta edad. "A los 14 años estudiaba y trabajaba en una imprenta para llevar dinero a mi abuela, y más tarde me hicieron encargado. Luego vendía refrescos a granel, trabajé mucho", ha recordado. Sin embargo, todo cambió cuando se trasladó a España allá por el año 1998. Fue entonces cuando conoció a Marujita Díaz y comenzó una comentada relación.
"Cuando la vi pensaba que era Sara Montiel y le dije que me gustaban sus películas. Me pidió que la acercara a casa y mi noche no tenía luces. Luego me invitó a la Feria Internacional de turismo de Madrid y me presentó como un empresario", ha señalado al mismo tiempo que ha asegurado que lo suyo no formó parte de ningún montaje como se habló en muchas ocasiones.
Aunque no llegó a enamorarse de Marujita, Dinio ha confesado que la llegó a querer "con locura" y ha negado que ella le pagase en algún momento por su compañía. "Tengo que reconocer que cuando me rompieron el coche, me vio llorar tanto que me compró uno de segunda mano. También me regaló un reloj. Nada más", ha sentenciado.
Por otro lado, también ha querido hablar de su infierno con las drogas, una etapa de su vida que le dejó muy marcado. "El mundo del porno me hizo mucho daño, me arrepentí mucho. Ahí me junté con malas compañías". Unas amistades a las que culpa de haber elegido el camino equivocado en su juventud.
Además, ha negado que acudiese a un centro de desintoxicación porque, para ir, primero hay que "tener la fuerza de voluntad para salir de esa mala vida". Pero toda esta mala época forma parte únicamente de su pasado, pues ha demostrado que es una persona nueva. "Para entrar en 'Gran Hermano' me hicieron una analítica, pruebas de cannabis, todo. No volví a tocar la droga más", ha comentado orgulloso.
Hace unas semanas, la pareja de Gustavo González aseguraba que no quería saber nada de él, dejando claro que en la actualidad no tiene ningún tipo de contacto porque "se inventó" que estaba saliendo con ella cuando ya mantenía una relación amorosa con el colaborador de 'Sálvame'.
Además, María narró un episodio de lo más peculiar que vivió estando con Dinio: "Se drogaba mucho, dio droga a mi gato (...) Quería meter al gato en la lavadora, me decía que en Cuba se comían a los gatos y se lo quería comer", explicaba en una entrevista. Una acusación de la que ha querido defenderse su supuesto protagonista dejando claro todo.
Asegurando que es mentira y que ama a los animales, ha aclarado que en Cuba nadie se come a los gatos y que no cree que nadie lo haga. "Nunca he vivido con ella. Solo estuve una vez en su casa y no fuimos novios. Fue una relación profesional", ha asegurado para la mencionada cabecera.