Un 45% de las personas que viven en alquiler está en riesgo de pobreza. España se coloca como el país con mayor porcentaje de toda la Unión Europea, según los datos del Eurostat. El porcentaje baja en personas que ya tienen una vivienda en propiedad y que pagan una hipoteca, lo que deja al país en el segundo puesto después de Grecia. La inflación, el coste de vida, la subida de alquiler y los empleos precarios- como esta oferta de trabajo- no ayudan en la búsqueda de un futuro estable.
Esta es una situación que viven muchos jóvenes en España, como Raquel y Ramón. Una pareja de 24 años que está a cargo de un hijo de cinco meses. “Tengo un grado medio de peluquería, empecé a trabajar en 2021 y estuve ahí durante dos años. Tras quedarme embarazada me echaron y no pude reclamar por mi tipo de contrato”, confiesa ella. Y es que la brecha de género existe en los sueldos, en el empleo e incluso en las pensiones. El Instituto Nacional de Estadística determina que el riesgo de pobreza es mayor entre las mujeres con un 21,1% en comparación con los hombres (19,8%) en 2022.
“Cuando trabajaba mi sueldo era de 1.145 euros y todo se iba en alquiler, luz, agua y comida. Ahora que los tres dependemos del sueldo de mi pareja es imposible llegar a fin de mes y menos con la subida de precios”, asegura Raquel a Informativos Telecinco. Una situación que no ha mejorado para la pareja ya que a ella “no le conceden ninguna ayuda”. Ramón, su pareja, tuvo su primer sueldo en construcción de 1.100 euros y en la actualidad trabaja en una ferretería donde gana 1.150. “Entre los dos ganamos 1.800 euros mensuales que son insuficientes para cuidar a un bebé”, afirma. Pero esto no les quita sus planes de futuro, ya que “quieren tener su propia vivienda” pese a estar tres años fuera de casa.
Otro caso es el de Laura, una estudiante de máster. Ella tiene 23 años y lleva seis años fuera de casa, pero continúa sin poder pagarse un alquiler por su cuenta. Ahora se encuentra en Madrid buscando un trabajo estable. “Sin la ayuda de mis padres no podría estar aquí porque, al ser becaria, mis ingresos no suben de 300 euros y no cubren ni un tercio de mis gastos”, declara. Y es que el precio medio del alquiler en España ha subido un 8,7% en 2023. La desigualdad y la edad de emancipación, según el estudio Empleo y Juventud en España en 2030, sigue estando muy por encima de la media de la Unión Europea en España. Entre las personas de 15 a 24 años ha crecido en 9,9 puntos y en las de 25 a 34 el aumento es de 3.
Tras la aprobación de la nueva Ley de Vivienda, el objetivo es frenar la escalada de precios y para ello se ha fijado un tope a la subida de alquiler de un 2 al 3% en 2024 y a partir de 2025 habrá un nuevo índice de referencia al margen del IPC. Entre las medidas adoptadas se encuentran beneficios fiscales para las viviendas de titularidad pública, con alquiler a precio reducido, y la posibilidad de prórroga extraordinaria anual para el arrendatario tras finalizar el contrato, entre otros.