Los niños no nacen en fines de semana o días de fiesta. Prueba de ello es que el pasado 25 de diciembre fue el día con menos nacimientos de todo el 2022. La asociación El Parto es Nuestro denuncia así el abuso de inducciones y cesáreas por causa no médicas.
El Parto es Nuestro recuerda que las fiestas navideñas no son motivo para inducir partos ni programas cesáreas en horario laboral.
Esta organización lleva tiempo denunciando que los hospitales programan los nacimientos de los niños para que no se produzcan en vacaciones, festivos o fines de semana y ponen como ejemplo los datos de esta pasado 25 de diciembre, el día con menos alumbramientos de todo 2022.
Los días en los que menos niños nacieron entre 2010-19 fueron el 1 y 6 de enero, 1 de mayo, 15 de agosto, 12 de octubre, y 6, 8, 24 y 31 de diciembre, según datos estadística de nacimientos del Movimiento Natural de la Población — del Instituto Nacional de Estadística (INE)— , señala la organización. Todos ellos son festivos nacionales.
Ya en 2016 El Parto es Nuestro publicó el informe ‘Nacer en Horario Laboral’ en el que se denunciaba, con datos de 1975-2010, que cada vez ocurrían menos nacimientos en fines de semana y festivos en la Comunidad de Madrid.
Aquel informe puso de relieve el exceso de partos inducidos y cesareas programadas con respecto a las recomendaciones de la OMS y Ministerio de Sanidad y, sin embargo, tiempo despuésnada ha cambiado al respecto en España.
Los hospitales se organizan, anteponiendo cuestiones no médicas al derecho de las mujeres a recibir servicios de salud reproductiva de calidad, para que los partos sucedan en días de diario, denuncia la organización.
El porcentaje de inducciones se ha incrementado de un 19% en 2010 a un 34% en 2018, triplicando así el porcentaje de inducciones recomendadas por la OMS (<10%). El porcentaje de cesáreas programadas se ha incrementado también: de un 8,5% en 2015 a un 9,2% en 2019.
La inducción al parto no está exenta de riesgos, por lo que su uso debe estar justificado por la presencia de factores de riesgo y solo realizarse tras una evaluación ajustada entre el riesgo/beneficio, según las recomendaciones de Sanidad. Programar partos por razones no médicas, sino de agenda, pone en riesgo la salud de mujeres y bebés y desatiende las recomendaciones de la OMS y el Ministerio de Sanidad, insiste la organización.
Las Comunidades Autónomas, las Consejerías de Sanidad y las gerencias de los hospitales deben asumir su responsabilidad organizando adecuadamente los recursos sanitarios de forma que el devenir de un parto no esté influido por la cercanía de un día festivo, reclama El Parto es Nuestro.