La presión policial contra narcotraficantes y sus narcopisos en el barrio barcelonés del Raval ha sacado a la luz el auge de mafias filipinas que trafican con una droga denominada 'shabú' y que básicamente es el nombre que recibe en este país asiático la metanfetamina, informa 20 Minutos
Más conocida como 'cristal', la metanfetamina está experimentando un crecimiento en toda Europa y en España, en particular, que preocupa a los cuerpos policiales y las agencias antidrogas. El 'shabú' se como cristales de sal gorda y es una droga sintética bastante más barata que la cocaína y diez veces más potente. Su adicción por su consumo tiene graves consecuencias. A diferencia de otros tipos de metanfetamina se fuma; ingerir el shabú puede significar la muerte.
Según el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA, por sus siglas en inglés) y la Agencia de la Unión Europea para la Cooperación Policial (Europol) el mercado de drogas se está diversificando como consecuencia de la estrecha colaboración entre las organizaciones criminales europeas e internacionales. Esto ha dado lugar a unos niveles récord de disponibilidad de drogas, un aumento de la violencia y la corrupción, así como a mayores problemas de salud.
El consumo en Europa de metanfetamina, la droga estimulante sintética más consumida del mundo, se ha concentrado históricamente en Chequia y Eslovaquia, pero "parece que se está extendiendo por otros países".
De hecho, detallan que los últimos datos de las aguas residuales revelan que la droga también está presente en Bélgica, Chipre, en el este de Alemania, España, Turquía y varios países del norte de Europa (por ejemplo, Dinamarca, Letonia, Lituania, Finlandia y Noruega).
De las 58 ciudades con datos sobre residuos de metanfetamina en las aguas residuales municipales de 2020 y 2021, aproximadamente la mitad (27) notificaron un aumento, de acuerdo con este informe.
Con estas "grandes cantidades" de metanfetamina en el mercado europeo, las dos agencias han mostrado su "preocupación" por el aumento de la demanda de esta droga, principalmente la que se puede fumar ('crystal meth'). "Esto podría tener implicaciones a largo plazo, como una mayor carga para los sistemas sanitarios y una amenaza para la seguridad pública", aseguran.
Las agencias indican que la metanfetamina "sigue desempeñando un papel relativamente pequeño en el mercado de drogas europeo". "No obstante, el último análisis muestra la creciente amenaza que supone esta droga en la región, a medida que aumenta la disponibilidad y el consumo se extiende a nuevas zonas", argumentan.
De hecho, entre 2010 y 2020, el número de incautaciones de metanfetamina en la EU-27 aumentaron más del doble (de 3.000 a 6.200), mientras que las cantidades incautadas crecieron en un 477 por ciento, hasta alcanzar las 2,2 toneladas en 2020.