Paula Rodríguez está viviendo con pánico desde que la separaron de su perrita Maia en el aeropuerto de Atlanta. La joven se disponía a pasar dos semanas de vacaciones en California junto a su mascota, que lleva a todas partes, cuando ocurrió el incidente. Aunque pudo viajar con ella en el avión tras salir de República Dominicana, justo antes de llegar a Atlanta, el personal de inmigración le advirtió que “no cumplía con los requisitos” de su visado de turista y le negaron el acceso al vuelo para llegar a San Francisco.
Tras pasar la noche en un centro de detención sin Maia, el personal le aseguró que su perrita estaría esperándola en la puerta. Pero no fue así. Al día siguiente, Paula tuvo que regresar en un avión de vuelta a casa obligada por la aerolínea y sin su animal de compañía. “Estoy en agonía”, confesó en un vídeo.
La joven comenzó su viaje sin saber que se convertiría en sus peores vacaciones. Desde República Dominicana se disponía a viajar hasta California haciendo una escala en Atlanta para disfrutar de las vacaciones. Pese a que todo comenzó bien junto a su perrita, una vez que aterrizó, el personal de inmigración le avisó de que tenía el visado caducado. Por lo que tenía que esperar al próximo vuelo para volver a casa al día siguiente.
Rodríguez tuvo que pasar la noche en un centro de detención, sin su perra, mientras esperaba el vuelo de vuelta. "Llamaron a un agente de Delta y me quitaron a Maia", confesó a CNN. Uno de los funcionarios de la compañía Delta Airlines tranquilizó a la joven explicándole que su perra estaría bien cuidada. "No era lo que yo quería, pero lo entendí. No podía hacer nada y confié en él", aseguró.
El personal de detención tenía que recoger a Paula y asegurarse de que cogía el avión de vuelta a República Dominicana. Pero ella exigía ver a su perra antes de coger el vuelo: "Les pregunté a todos, les dije que necesitaba tiempo para localizarla, que ella estaba enferma y que quería limpiar su perrera, y me dijeron: 'Vamos a la puerta, ella tiene que estar allí'". Pero no estaba.
"Entré en pánico y dije: 'Lo siento, no puedo subirme cuando me dices que no sabes dónde está mi perra'", esas fueron las palabras de la joven tras observar que el personal no sabía donde se encontraba Maia ni mostraban tener el tiempo suficiente para averiguarlo.
Así lo ha publicado Paula Rodríguez en Instagram:
Tras negarse a coger el vuelo, Rodríguez fue obligada a coger el siguiente porque no podía pasar más de 24 horas en Estados Unidos con el visado caducado. Así que se marchó sin Maia: "Nunca voy a ningún lado sin ella". Al llegar a República Dominicana, la joven presentó una reclamación. La explicación de Delta es que la mascota se escapó de su jaula cuando el personal intentaba trasladarla y que, desde entonces, no ha vuelto a aparecer.
"He estado viviendo una pesadilla desde el viernes, sabiendo que mi bebé está asustada en algún lugar o podría estar herida", explica la joven desconsolada. Pese a que su madre viajó a Atlanta en busca de Maia, la perrita sigue desaparecida.