El cambio climático arrebata a San Sebastián 150 toldos en La Concha: “No es un capricho de Costas, la playa está cambiando"

Imagen de los toldos en el arenal donostiarra durante el verano

La Concha, el más famoso arenal de la ciudad vasca de San Sebastián, va a quedarse este verano sin 150 de sus tradicionales toldos. Es decir, van a pasar de 440 a 290, de un plumazo tras la decisión de Costas de eliminar aquellos que invaden los seis metros que hay que dejar libres desde la orilla, cuando sube la marea. Una situación que no afecta a las playas de Ondarreta y Zurriola. “No es un capricho de Costas”, defiende el Ayuntamiento donostiarra.

Si entre los donostiarras que cada verano disfrutan de un toldo en la playa de La Concha hubiera algún negacionista del cambio climático, tal vez, ver de tan cerca las consecuencias de la subida del nivel del mar les haga replantearse su opinión sobre el calentamiento global. "La playa está cambiando en los últimos tiempos", explica el Ayuntamiento, que apunta al "cambio climático como actor fundamental".

El Servicio Provincial de Costas de Gipuzkoa notificó al Ayuntamiento de Donostia de la obligación de eliminar esos 150 toldos de los 440 previstos en la playa de La Concha para “mantener despejada una franja de seis metros entre la orilla y los toldos, situación que era difícil de mantener en pleamar, especialmente en días de mareas vivas o temporales”, explica el Consistorio.

El Concejal de Mantenimiento Urbano, Carlos García, ha señalado que “esta orden de Costas deriva de un informe elaborado por ese organismo que evidencia que la línea de marea está subiendo en los últimos años como consecuencia, sin duda, del cambio climático. Hemos tratado de mantener la situación de temporadas pasadas, pero lo que hasta ahora había sido una recomendación es ahora una exigencia, por los que hemos procedido a aprobar con urgencia unas nuevas bases para el servicio de toldo que contemplan la supresión de 150 toldos en La Concha".

Sorteo jueves 20

La ley de Costas ya dio, hace quince años, un buen mordisco al espacio que ocupaban los toldos en La Concha y los redujo a la mitad. Ahora la historia se repite para desesperación de algunos: “Es que tienen que meterse en todo”, “van a acabar con una tradición muy bonita” o “qué pena”. Y para regocijo de otros que ven como “un abuso” que algunos tengan su trozo de playa reservado “mientras los demás estamos como sardinas en lata en la arena, cuando sube la marea”, “la arena tiene que ser para todos”.

Pese a la eliminación de esos 150 toldos, en La Concha seguirá habiendo 290, 240 en la Zurriola y otros 424 en Ondarreta. Además, de 157 sombrillas y 82 carpas. En total, 1.193 parasoles que se sortearán este jueves 20, lo hacen una vez cada tres años, tras la celebración, las personas adjudicatarias podrán elegir la ubicación del toldo.

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