El pistolero del taxi de Benalmádena, Málaga, declaró tres días después de subirse al vehículo con una escopeta mientras gritaba: "Voy a matar inocentes". El acusado pidió al taxista que le llevara hasta la comisaría de la Policía Local con la intención de vengarse de aquellos que le habían robado su vehículo en el Mercadona. Ahora, en exclusiva, mostramos sus declaraciones ante el juez.
'Vamos a ver' muestra las declaraciones que ha realizado el autor del suceso en sede judicial. Para empezar, el acusado explica que "yo al taxista no sé lo que le pude decir, era un señor que no le conocía de nada". Tras esto, justifica su violencia diciendo: "En mi estado de embriaguez, un andaluz como yo dice muchas barbaridades".
Uno de los aspectosfundamentales para los letrados era saber por qué se montó en el aquel taxi con armas. El detenido mantiene la misma línea que en sus declaraciones anteriores: "No me acuerdo muy bien, parece ser que sí portaba dos armas, no lo recuerdo muy bien, mis armas son de caza, soy cazador".
Tras esto, los jueces insisten al acusado sobre las armas y éste justifica su versión: "Yo me quiero deshacer de las escopetas porque ya no quiero ser cazador, las llevaba en el taxi para venderlas, quiero vender todas... yo no iba a la policía, la policía estaba allí".
En cuanto a su actitud contra los agentes, añade que "yo salí y hablé con ellos, las armas estaban dentro, yo nunca he sacado un arma, jamás, lo puedo decir hasta muerto porque yo soy incapaz de sacar un arma a alguien". Por último, el detenido reitera ante los letrado que "jamás amenazaría a un policía, me acuerdo de que todos ellos me hicieron daño. A mí me falta de mi cartera dinero, me han golpeado y me han destrozado".