{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Rubén Sánchez, Charo Vega, Ainhoa Cantalapiedra y Juan Muñoz son los primeros nominados de ‘Supervivientes 2022’ y quienes tendrán que medir sus fuerzas ante la audiencia del reality show más extremo de la televisión.
Ellos han inaugurado las nominaciones en esta edición, pero no son los primeros famosos de la historia en exponerse a la decisión del público. Echamos la vista atrás para recordar quienes fueron los rostros VIP que estrenaron el televoto hace dieciséis años.
Santo Domingo fue el destino que recibió a los primeros supervivientes VIP de la historia y, también, el lugar en el que se estrenaron las nominaciones. Unas votaciones que fueron muy similares a las que se dan en la actualidad y de las que salieron los nombres de las primeras famosas que tenían que enfrentarse al televoto.
En la palapa, los rostros VIP fueron pasando a un altar en el que había una pizarra para ir apuntando los nombres de sus elegidos para la expulsión. Cada uno de los concursantes tenía que dar dos nombres y las razones y, después, borrar la pizarra para no dejar rastro de su elección.
La famosa que inauguró la tablilla fue la actriz Marta Valverde, quien tuvo el honor de ser la primera en nominar en la edición de ‘Supervivientes’ que se celebró en 2006. No se anduvo con muchos rodeos y, aunque aseguró que le daba pena votar, eligió que fueran Marlène Mourreau y Verónica Hidalgo quienes tenían que enfrentarse a la expulsión.
Después de Marta Valverde, fueron pasando, uno a uno, todos los concursantes de la edición y emitieron sus votos. De ellos, salieron las tres primeras nominadas de la historia: Marlène Mourreau, Verónica Hidalgo y Carmen Russo.
La primera salió a la palestra por los votos de la mayoría de sus compañeros, un total de nueve votos; la segunda, tres votos y la tercera tuvo que sentarse en el banquillo tras recibir cinco nominaciones del resto de concursantes.
Las tres se enfrentaron a la decisión del público en la misma gala en la que fueron nominadas y la elegida para volver a España fue Marlène Mourreau. Le dieron la oportunidad de ir a la Última Playa, el palafito de la época, pero ella se negó y prefirió decir adiós a la experiencia, convirtiéndose en la primera expulsada de 2006.