La supervivencia extrema no cesa y una fuerte tormenta hacía pasar a los concursantes 'all stars' empapados bajo la lluvia. Y es que como bien decía Jorge Pérez, lo peor del 'Supervivientes', además del hambre, son las duras lluvias torrenciales que aparecen cuando menos te lo esperas. Además, sale lo peor de cada uno y en ese momento, Marta Peñate recordaba algo que había dicho con anterioridad y que les habría salvado del auténtico tormentón que les cayó.
De repente, el cielo de Playa Leyenda se oscurecía y las lluvias comenzaban a aparecer. "No, no", negaba Adara Molinero. Todos corrían rápidamente y se apresuraban. Algunos como Abraham García mostraban su lado más optimista: "No pasa nada, está todo bajo control". Pero la fuerza y la intensidad de la lluvia era de un calibre inmenso. Y lo que era peor: no tenían dónde resguardarse.
"¿Esto es broma, no?", se preguntaba Marta Peñate, después de que Olga Moreno le recordase que ella (Marta) quería precisamente poner una lona momentos antes de lo que estaban viviendo. "La lona ahora nos habría venido... Mira esto, por favor....", apuntaba Peñate. El silencio de todos, estremecedor, era sustituido por el fuerte sonido de la lluvia, que caía sin piedad y sin compasión alguna.
"Esto es lo peor de 'Supervivientes'. El hambre y llover", subrayaba Jorge Pérez, resignado. Amanecía en Playa Leyenda y los concursantes miraban al cielo con miedo de que les volviese a caer una fuerte lluvia torrencial. "Vaya asco de noche", aseguraba Lola. Pero se ponían manos a la obra y hacían sus matutinas labores de pesca, recogida de leña y demás quehaceres.
El optimismo imperaba mientras comían: "¡Un brindis por nuestra comida de hoy!", exclamaba Marta Peñate. "¡Bien, sin dormir y con 40 gramos de pescado!", decía por su parte Sofía Suescun. ¡Con este optimismo, los supervivientes van a llegar todo lo lejos que quieran en su aventura en Honduras!