Mila Ximénez comenzaba la tarde con una rectificación y es que durante su brote con María Patiño hizo ciertas alusiones a su situación actual con respecto a la salud de las que ahora se arrepiente.
La colaboradora brotó porque María le afeaba vía mensaje la defensa que estaba haciendo de Terelu Campos, creyó que para defender a su amiga, a ella la llamó cobarde y aunque Mila lo negó, el conflicto continuó hasta el punto de que Mila se fue de plató llorando.
María le había pedido que respirara, ella le respondía que lo haría cuando le salga del “mismísimo” y añadía: “Respiro, respiro pero que antes, pero sigo respirando”. Y es que en estos momentos, su cabeza solo tiene que ocuparse de una cosa: cuidarse.
Gema López le explicaba entonces que ante esa alusión a su enfermedad, María no podría rebatir con ningún argumento y 24 horas después, Mila le ha dado la razón: no quiere ser diferente, quiere ser igual a los demás.
“Cometí el error de utilizar algo de forma que era injusta para mis compañeros, espero que no vuelva a suceder porque no me lo quiero permitir”, añadía la colaboradora: “Sigo siendo la de siempre y tienen derecho a responderme como siempre, yo no he bajado el tono. No quiero ir de nada ni quiero dar lástima”.
Pero ¿En qué punto está con María Patiño? Reconoce estar “decepcionada” pero también recuerda que no es algo reciente: “Es desde hace tiempo, pero también la puedo entender, cada uno tiene una capacidad para afrontar ciertas cosas en ciertos momentos”.
Además, ante las preguntas de Kiko Hernández, la colaboradora apuntaba que ve a su amiga “a veces” un tanto “excesiva” e incluso “obsesiva” en lo que se refiere al trabajo.