Jessica Bueno está “muy enfadada” ante la polémica generada por la celebración de la comunión de su hijo mayor, Fran. Kiko Rivera solo pudo asistir con su mujer e hijas, nadie más de su familia pudo acudir y la modelo reaccionó con evidente enfado. ‘Sálvame’ ha localizado a la modelo y a su familia cuando viajaban desde el País Vasco a Sevilla y el reportero Kike Calleja nos transmitía que está: “Muy alterada”.
‘Sálvame’ nos ha mostrado las imágenes en exclusiva y es que, a su llegada a la casa de Jessica el equipo se dio cuenta de que salieron en caravana en tres coches con destino a Sevilla. Han podido charlar con ellos durante una parada en una estación de servicio y el programa nos mostraba las imágenes: veíamos a una Jessica con gesto muy serio entrando en la gasolinera, salía pocos minutos después con un refresco y en estricto silencio.
El reportero hablaba con su marido, Jota Peleteiro, mientras Jessica estaba en el interior y el futbolista solo nos decía que está “tranquilo” y que no iba a hablar de nada. La familia al completa subía de nuevo al coche y se marchaban.
En el plató de ‘Sálvame’, Kike nos contaba que había visto “muy alterada” a Jessica y que fuera de cámaras le había pedido que la dejara tranquila porque no iba a participar en nada: “Viendo el estado en el que estaba no queríamos que se pusiera nerviosa”.
Quien sí les ha dicho algo ha sido la madre de la modelo, que les ha invitado a formular las mismas preguntas a la otra parte, en este caso, la familia Rivera.
Para Rafa Mora, la culpable de todo es Anabel Pantoja y es que cree que Kiko Rivera solo llamó para consolar a su prima, que lloraba por no haber sido invitada a la comunión: "Ahora el marrón se lo come él".