Beltrán de Ceballos conoció Doñana con 12 años y desde entonces supo que ahí estaba su "centro". Para él, el sitio más maravilloso del mundo. Decidió dedicarse por completo a la naturaleza y cuando estaba estudiando en Londres tuvo la oportunidad de poder comenzar a trabajar por conservar este mágico lugar situado entre la desembocadura del río Tinto y del Guadalquivir.
Doñana era antes un coto de caza real y pasó a ser Parque Nacional en 1969. Sin embargo, está en peligro debido a la falta de agua causada por los más de 700 pozos ilegales que existen en la zona. Esa escasez de agua imposibilita la habitabilidad de muchas especies que emigran a a zona. Beltrán se ha enfrentado a gobiernos de todos los colores por perseguir y cerrar dichos pozos.
"Doñana está herida de muerte y es porque no hay agua. Es un espacio protegido. Único en el mundo y se está dejando caer desde dentro (...) ¿Por qué no hacen nada? Esto funciona por el número de votos. Es la contabilidad que le interesa a estos señores pero la naturaleza se la están cargando", denuncia.
Precisamente durante la grabación de 'Quijotes del s.XXI' asistíamos al momento en el que Beltrán encontraba uno de los pozos ilegales.
Tomando fotografías para su posterior denuncia, también veíamos que unos señores rápidamente se acercaban a Beltrán para conocer sus intenciones. No es la primera vez que se ha tenido que enfrentar a situaciones de este tipo. "Ha habido algunos episodios muy duros. A lo largo de mi vida he estado sometido a temas violentos porque hay gente que se empeña en solucionarlo así", aseguraba.
Pero Beltrán no se piensa dar por vencido. Tal y como su hijo dice, "es un Quijote que conseguirá salvar Doñana o morirá en el intento". Y es que Doñana está en peligro. Según 'WWF', si esto continúa así al parque no le quedarán más de 30 años de vida.