La relación entre Juan Reyes y Norma Elizondo no pasa por su mejor momento. Los problemas de los mellizos, y la llegada de Rosario Montes han provocado cantidad de discusiones en el matrimonio y que cada día les resulte más difícil entenderse.
Las cosas empeoran con la llegada de Albin Duarte. Andrés Reyes celebra una fiesta en la hacienda e invita a algunos de sus amigos más cercanos. Entre ellos se encuentra un atractivo hombre llamado Albin. Se trata de uno de los caballistas más aclamados de la región. Es apuesto, inteligente y muy caballeroso, algo que no pasa inadvertido para Norma.
Aunque en un primer momento, la hija de Doña Gabriela se muestra distante con el amigo de su sobrino, termina bailando con él y disfrutando de una entretenida conversación a la luz de la luna. Para demostrar que es capaz de controlar sus celos, Juan Reyes celebra otra fiesta e invita a Albín. Sin embargo, se arrepiente de su idea cuando ve la actitud que su mujer tiene con él.