Elena Rodríguez no ha podido cumplir su sueño de llegar a la final de 'GH DÚO', pero sí que ha conseguido quedar cuarta en esta edición en la que ha recordado en muchos momentos a su novio, Pedro Solà, con el que incluso pudo hablar por teléfono con motivo del Día de los Enamorados porque el empresario no quiso acudir hasta la casa de Guadalix de la Sierra porque prefiere mantenerse alejado de los focos.
Por esa razón, la madre de Adara Molinero tampoco esperaba que su novio estuviera presente en plató el día de su expulsión ni que le hiciera llegar ningún mensaje, pero se equivocó porque fue el primero en aparecer en el vídeo que recibió en la segunda semifinal. En él le decía que estaba muy feliz por verla cumplir su sueño y le demostraba que seguía esperándola para retomar sus planes juntos, esos que llevan haciendo ocho años, desde que se conocieron en 2016.
Fue Pedro el que se fijó primero en ella cuando seguía 'Gran Hermano 17' para ver a su hijo, Marc Solà, defendiendo a Rodri Fuertes. Así fue cómo descubrió a Elena, que iba a plató asiduamente para defender a Adara. Ocho años después siguen compartiendo viajes juntos, planes en familia - ambos se llevan muy bien con los hijos del otro - e ilusiones, pues el empresario siempre ha apoyado a su novia en sus aventuras televisivas: primero en 'Supervivientes' hace ya cuatro años y ahora en 'GH DÚO'.
Tanto es así que compartió una foto con una copa de vino para 'brindar' por el logro de que la madre de Aitor Molinero fuera finalista hace una semana y ahora que ya ha terminado su aventura en este reality ha hecho lo mismo para celebrar su vuelta a casa: "Va por ti, Elena, ¡bienvenida!". A la taxista le ha hecho mucha gracia este gesto de su novio y le ha agradecido el detalle en sus stories de Instagram compartiendo la foto y añadiendo un "yo también te quiero".