Carla Barber ha tenido que llamar a su pediatra una vez más. Su hijo Bastian Segundo lleva varios días con fiebre, algo que ha preocupado mucho a la exconcursante de ‘Supervivientes’. El pequeño ha necesitado ser puesto en tratamiento tras ser diagnosticado con una una infección respiratoria.
Conciliar su vida profesional y familiar no es fácil para Carla Barber, que tiene la suerte de poder contar con un especialista a domicilio que acude a su casa cada vez que lo necesita. El pediatra de Bastian y Bosco ha salvado a la influencer de más de un apuro, como ha ocurrido ahora, pues mientras ella se encontraba en una de sus clínicas trabajando, el médico ha podido diagnosticar y poner en tratamiento a su hijo enfermo.
“Bastian ha empezado con antibiótico hoy. Tiene infección de vías respiratorias. Por eso estaba todavía más demandante y mimoso, además de celoso a la mínima que me acercaba a Bosco”, cuenta la nueva novia del también doctor Carlos Rubí.
“Le he duchado y dormido, mientras dormía también a mi príncipe pequeñito. No sé cómo, pero Bastian se ha dado cuenta de que estoy sola y se ha portado bastante bien. Se ha dormido al lado mío solito”, explica mientras pone de manifiesto una vez más lo complicado que le resulta hacerse cargo de dos bebés estando ella sola en casa.
“Hoy ha venido nuestro pediatra. Siempre tan atento y pendiente cuando le necesitamos. Hace visitas a domicilio y cuando le llamé desde la clínica esta mañana se acercó enseguida a ver a Bastian”, explica Miss España 2015, que dice que gracias a la llamada telefónica que le hizo el doctor, pudo tranquilizarse y continuar con su jornada laboral.
“Me llamó estando con él y me explicó todo al detalle. Esta mañana estaba bastante preocupada y su visita me permitió trabajar tranquila”, apunta.
Tras hacer pública su preocupación y agradecer al especialista de su hijo el trato y rapidez ofrecidos, Carla ha reflexionado sobre lo diferentes que son sus hijos. El pequeño Bosco tiene solo tres meses de vida y tiene un carácter completamente distinto al de su hermano mayor. No en vano, su abuelo le llama “San Bosco”, en relación a lo tranquilo y bueno que siempre ha demostrado ser.
Una realidad muy distinta a la que vive con su inquieto príncipe Bastian Segundo, que además de ser un pequeño torbellino, se ha puesto malo en infinidad de ocasiones. “Bosco ya no cabe en el capazo. ¡3 meses y está enorme! Es muy bueno, aún no se ha puesto malo ni una sola vez, ojalá le dure. Bastian ha estado malito bastantes veces y desde bien pequeñito”, ha dicho la reina del ‘pinchi pinchi’ mientras reconoce pasarlo “muy mal” cada vez que su hijo enferma: “Qué mal se pasa, la verdad”.