Bosco Martínez-Bordiú llegó a Honduras siendo prácticamente un desconocido, con su pertenencia a una conocida estirpe de aristócratas como único aval. Sin embargo, su protagonismo fue creciendo con el paso de las semanas y ha terminado convirtiéndose en el ganador de 'Supervivientes'. Hoy ponemos el foco en sus dos hermanos: Pablo y Lucas, con los que está muy unido y con los que tiene un increíble parecido físico.
Tremendamente discretos, los hermanos de Bosco Martínez-Bordiú mantienen un perfil muy bajo: durante los más de 100 días que su hermano estuvo pasando penurias en el Caribe no pisaron un plató de televisión y tampoco tienen especial presencia en redes sociales. Los otros dos hijos de Clotilde Martínez-Bordiú y Pedro Juan Blanch viven el éxito de Bosco desde el anonimato.
Gracias a Linkedin puedo contarles que Lucas está licenciado en Ingeniería Mecánica y reside en Suiza y en el país alpino trabaja desde hace casi un año para una multinacional de consultoría tecnológica. Según los datos que facilita en la red social para profesionales, también ha prestado servicios en varias empresas dedicadas a las energías renovables o de juegos para móviles. Formado en Estados Unidos y amante de los viajes, el hermano de Bosco mantiene privatizado su perfil de Instagram, aunque aparece en algunas publicaciones del ganador de 'Supervivientes 2023'.
Mención aparte merece el caso del otro hermano de Bosco, Pablo. Es tan sumamente discreto que no tiene si quiera cuenta en Instagram, pero también es un puntal para su famoso hermano. Gracias a las fotos que el célebre naufrago ha colgado en sus redes sociales sabemos que disfruta de las mismas actividades que su hermano pequeño: esquí, viajes y las cosas buenas de la vida.
A pesar de su escaso rastro digital, su tía Kucca Gotor (que durante los años 90 triunfó como diseñadora de moda y socialite) contó que sus ‘brothers’ no se perdieron una sola gala del programa y están muy orgullosos de él, especialmente tras su triunfo. “Es el programa para él. Estábamos todos felices cuando decidió apuntarse. Su madre Clotilde fue la primera que le empujó y le dijo que esta era su oportunidad, no solo para hacer unos ahorrillos, sino para hacer todo tipo de locuras. Es perfecto para él”, declaró a Mujer de Hoy.
Antes de partir hacia Honduras, Bosco también era un joven discreto: tenía una cuenta de Instagram que primero privatizó y luego cerró para concentrar todo su rastro en social media en el perfil que abrió de cara a su paso por los Cayos Cochinos. Sin embargo, gracias a mis dotes detectivescas, puedo contarles que Bosco obtuvo el bachillerato en la American School of Madrid y posteriormente estudió en dos universidades internacionales: la Drexel University de Philadelphia, en Estados Unidos, y la Franklin University, de Suiza. Antes de enrolarse en la aventura televisiva estaba trabajando para un hotel en el país alpino.