La candidatura de Ismael Beiro a la alcaldía de Cádiz ya está en marcha. El ganador de la primerísima edición de ‘Gran Hermano’ colgaba hace unos días una imagen de su cartel electoral en una marquesina de autobús en su red social. Se presenta como líder del partido “Cadiz, Sí”, que comenzó como una plataforma vecinal descontenta con los políticos locales. Veintitres años después de su victoria en la primera edición del reality, muchas cosas han cambiado en la vida del futurible primer edil: ha tenido dos hijos, casi pierde la vida en un accidente de circulación y ha compaginado su personaje público con nuevos estudios y aventuras empresariales.
A sus casi 50 años, Ismael ya no es aquel joven alocado que montó “la mafia” con Iván Armesto en la casa más famosa de la televisión. Ahora es padre de dos hijos, Aurora, de casi seis años, y Rodrigo, de cuatro. Los dos son fruto de su estable relación con su pareja, Aurora Vázquez, con la que lleva más de 15 años de relación.
Cuando entró en 'Gran Hermano', el 23 de abril del año 2000, Ismael era marino mercante. Sin embargo, su carrera profesional poco o nada ha tenido que ver con aquello. En estos 23 años, antes de convertirse en político, Ismael ha sido presentador, monologuista e incluso cantante (publicó un disco titulado “Uno de tantos”). También se ha dedicado al negocio de las criptomonedas y montó una promotora de eventos.
Además de su experiencia profesional, en la actualidad Beiro está terminando el Doctorado en Ciencias de la Comunicación con la tesis ‘Alimentos transgénicos, posibles soluciones para acabar con el hambre en el mundo’.
Cuando estaba en lo más alto de su popularidad un trágico accidente de circulación lo tuvo en coma durante mes y medio cuando circulaba en moto y un todo terreno lo arrolló en un semáforo. Según contó en MTMAD, aquel episodio fue realmente traumático: “Empecé la vida con la cabeza en otro sitio, mareado, con dificultades para andar, roto entero". Tardó dos años en recuperar la movilidad al completo y a día de hoy sigue teniendo limitado el pie y ha perdido al completo el olfato.
Como buen gaditano, Ismael es un auténtico fanático de los tres pilares socioculturales de la ciudad que aspira a regir: disfruta como un niño de las chirigotas de los carnavales, se emociona con las procesiones de Semana Santa y no se pierde un partido del Cádiz F.C. De estas tres aficiones da buena cuenta en sus redes sociales, donde se muestra muy activo.
Beiro no olvida su paso por el programa de televisión que le cambió la vida. De manera recurrente habla de él con enorme cariño en su feed de Instagram con fotos de su paso por la casa o del momento en el que fue nombrado ganador de aquel “experimento sociológico”. “Fue una suerte haber vivido la auténtica y única experiencia con un equipo de profesionales fantásticos y los mejores compañeros con los que podía haber vivido esta santa aventura”, dice.