Desde que Sofía Suescun pidiera a su madre que se marchase de su casa en la capital, Maite Galdeano ha establecido su nueva vida en La Manga. Es allí, en Murcia, donde el pasado 16 de octubre acudía de urgencia al hospital Santa Lucía de Cartagena tras sufrir un desvanecimiento en plena calle, según señaló Pedro Jota Fernández. Unas horas después, la influencer, que se mantenía alejada de las redes sociales, ha aparecido en sus historias temporales donde ha vuelto a pronunciarse acerca de la polémica con su hija.
“Mi hija Sofía me ha echado de casa. Todo inducida por el ser que tiene al lado. Habían cambiado todos los bombines de la casa. Salté la valla y me hice esta raja llena de sangre. Llamé a la Guardia Civil y bajó la policía”, explicaba Maite tras abandonar el domicilio en el que residía junto a Sofía y el novio de esta, Kiko Jiménez. Junto a su mensaje, Galdeano añadía una fotografía en la que mostraba su pierna y las consecuencias de lo descrito.
Ahora, la vasca ha mostrado a través de sus redes sociales cómo está a día de hoy su herida, cuando han pasado más de dos meses desde que se dieran los hechos: “Así va a quedar mi cicatriz en el interior de mi muslo”, ha comenzado explicando sobre la señal que se puede observar en la imagen. Es entonces cuando, tras ello, ha vuelto a mandar un mensaje a su familiar y ha atacado sus decisiones: “Ojalá nunca habernos movido de Pamplona, éramos mucho más felices y no habría pasado la tragedia”, ha concluido.
El colaborador de ‘En todas las salsas’ revelaba que Maite tuvo que acudir a urgencias tras sufrir el “un desvanecimiento en plena calle, en el kilómetro 4 de La Manga del Mar Menor”: “Se la llevan a urgencias y ella llega a esa sala de espera muy nerviosa y pidió que la atendieran en una sala a solas. Nos dicen que no les consta que haya hecho noche en el hospital y que le atendieron en Psiquiatría por el estado nervioso y de ansiedad en el que llegó al hospital. Estaba pidiendo cosas poco coherentes y el médico que la atendió la remitió a Psiquiatría", explicó Pedro Jota, quien también afirmó que estaba pidiendo que le llevasen a una “sala aparte” porque decía que “es muy famosa”.