Isabel Jiménez, desde Paiporta, uno de los puntos más devastados por la DANA en Valencia, ha querido informar del estado en que se encuentran las personas más dependientes, con algún tipo de discapacidad, y sobre todo personas mayores que, en estos momentos tan duros, dependen completamente de la ayuda que les proporcionen.
Sobrecogidos por el drama, lo que sorprende es no obstante el mensaje que trasladan; un mensaje “de gratitud, de sentirse acompañados por esos voluntarios que están haciendo una labor tan importante y esos vecinos que se están ayudando entre ellos”.
“Son de otra raza”. Ellos te dicen: “Al final, lo importante, es que estamos vivos”, cuenta la presentadora de Informativos Telecinco, comprobando sobre el terreno la desolación y la devastación causada por la DANA.
Acompañando a uno de los voluntarios, ha visitado a un hombre mayor que tiene a su hija con una discapacidad: “Está en silla de ruedas, incapacitada, no se puede levantar”, explican.
En su vivienda, ella misma, –Rosi–, nos expresa la desolación ante todo lo que está ocurriendo: “Estoy sufriendo mucho porque yo soy una persona muy dependiente dentro de mi discapacidad”, lamenta.
Junto a ella, en la misma habitación en el momento de entrevistarla, Rosi cuenta que está una joven a la que no conocían: “Esta chica es una amiga que nos hemos hecho. No nos conocíamos y, a raíz de todo esto, van a salir nuevas amistades”, nos revela.
Ambas lamentan que “hay mucha gente que necesita ayuda porque las calles no están para salir”.
En las inmediaciones de la vivienda, todo sigue cubierto de barro, destrozos y escombros dejados por la DANA; un desolador escenario en el que las personas mayores no pueden caminar. En esta situación, no pueden pasar ni salir y dependen totalmente de lo que les lleven otras personas, los voluntarios y los vecinos.
Todo esto nos lo cuenta también Elvira, quien relata que su marido está “operado del corazón” y ella tenía que ir a hacerse unas pruebas el lunes para ver si le ponían “un marcapasos”.
“Yo, como madre que ha perdido un hijo joven, de 32 años, pienso en los que están muertos. Esos me dan una pena que no puedo evitarlo”, cuenta, rompiendo a llorar.
También otra afectada expresa la desolación del lugar: “Tú eres joven, pero si fueras vieja y tuvieras esto, estarías igual”, dice otra mujer mayor a nuestra presentadora Isabel Jiménez.
Después de una semana, relata, tienen imposible poder salir a la calle. Todo sigue lleno de escombro y barro.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.