El verano está a la vuelta de la esquina y todo apunta a que las mascarillas van a seguir siendo obligatorias para evitar posibles rebrotes de coronavirus. Los termómetros comienzan a pasar de los 30 grados y la sensación de ahogo se nota especialmente al llevar este artículo.
No obstante, no llevarla no es una opción. Por ello, te vamos a facilitar una serie de consejos que podrán hacerte más agradables los meses de verano con mascarilla.
En primer lugar, serán importantes las medidas generales que siempre se recomiendan para hacer frente al calor: estar bien hidratados, utilizar protección solar, intentar buscar las zonas de sombra, vestir ropa ligera, etc.
Pero a estos consejos básicos, añadimos nuevas recomendaciones basadas en el uso de mascarilla. Todas ellas te provocarán sensación de ahogo, pero debes saber que algunas lo harán menos que otras. Cuanto menos se humedezcan, más cómodas serán.
Los expertos han elaborado el ránking definitivo. Las mascarillas que lo lideran son las FPP2 idóneas para hacer ejercicio. Se adaptan a la cara, son finas y hechas con materiales transpirables. A ellas se suman las mascarillas quirúrjicas, que también son transpirables.
Las menos aconsejadas son las higiénicas reutilizables. Tienen varias capas y, además, no son transpirables. Las acompañan las FPP2 rígidas sin válvula. Se clavan y producen incomodidad.
Pero recordemos que llevando mascarilla estamos respirando nuestro propio aire continuamente, por lo tanto, va a ser caliente sí o sí. Después de haber pasado una larga cuarentena, seguir amoldándonos a horarios podría ser otra solución. Aprovechar para salir en las horas más frescas del día, es decir, a primera hora de la mañana o cuando ya ha caído el sol, reducirá la sensación de ahogo.
A estas se suman dos últimos consejos del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza. Secar el sudor que se pueda ir produciendo bajo la mascarilla para evitar que ésta se humedezca, y cambiarla por otra si consideramos que ya está bastante deteriorada.