La Audiencia Provincial de Pontevedra ha levantado la protección a una presunta víctima de violencia machista. La joven, de 20 años, de Sanxenxo, lleva meses denunciando las amenazas, incluso un intento de atropello de su expareja, sobre el que llegó a pesar una orden de alejamiento. Su familia asegura que vive atemorizada y la decisión del tribunal ha sembrado la polémica.
"Está con fármacos, son muchos días, semanas, meses", explica su madre. Ella es incapaz de hablar. A sus 20 años está viviendo todo un calvario que comenzó cuando intentó dejar una relación que no quería: "No entiende el no", explica la madre.
Los mensajes amenazantes no cesan: "O empiezas a dejar en paz a nuestro amigo y a sacar noticias falsas o un día de estos te vamos a matar", la escriben.
Primero fue la luna del coche destrozada con una piedra, y luego las piedras sujetaron amenazas manuscritas. El acoso en redes incluye además a su familia: "Vamos a ir a por ti", advierten.
En el ayuntamiento le dieron un teléfono para víctimas de violencia machista que usó ese mismo día para denunciar, con un testigo, un ataque de su expareja. Una denuncia que solo sirvió para que las amenazas se incrementasen: "Vas a vivir con miedo toda tu puta vida, por mucha orden de alejamiento".
Una juez le impuso a su expareja una orden de alejamiento, pero ahora la audiencia de Pontevedra la ha revocado.