Los docentes de todas las etapas de la enseñanza madrileña están llamados este martes a la huelga, convocada por CCOO, UGT, STEM y CGT en protesta por los "incumplimientos" en la seguridad sanitaria frente al coronavirus. La Comunidad ha decretado unos servicios mínimos de casi el 100 %.
En una encuesta de CCOO al profesorado, un 73% de los participantes ha apoyado mantener la convocatoria de huelga, al considerar que las medidas para garantizar la seguridad en los centros "no se han terminado de cumplir, o bien se están cumpliendo con incertidumbres e inseguridades", y en algunos casos no se han puesto en marcha todavía.
"Es una huelga que podría haberse evitado pero la consejería no ha cumplido", según la secretaria de Enseñanza de CCOO, Isabel Galvín, que destaca la "improvisación de la consejería que no ha respondido satisfactoriamente" a las necesidades de contratación, reducción de ratios en las aulas, ampliación de espacios e incorporación de enfermera escolar a los centros.
Siguen faltando 1.057 docentes de los 7.398 comprometidos por el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, ya que "a día de hoy solo se han incorporado 6.341".
Además, "no se ha regulado un sistema ágil y eficaz para la sustitución inmediata de bajas del profesorado. Con esta situación, falta algún profesor en todos los centros pero hay algunos centros donde faltan hasta ocho", asegura Galvín.
Los contratos COVID que se están haciendo "no tienen garantía de ser para todo el curso y hay preocupación de que les despidan a mitad de curso. Por eso, mucha gente no ha respondido a los llamamientos y se quedaron 697 vacantes sin cubrir porque los convocados rechazan la plaza".
Las 150 enfermeras escolares comprometidas "no han llegado a los centros", que se están auto-organizando y cuando detectan un posible positivo "llaman a Salud Pública o a Prevención de Riesgos Laborales y no les contestan. Los directores no saben si cerrar aulas concretas o el centro educativo entero. Están teniendo que tomar decisiones de urgencia sin ser la autoridad sanitaria".
CCOO ha recurrido los servicios mínimos "abusivos en que casi el 100 por 100 de la plantilla de una mayoría de centros haya sido nombrada servicios mínimos", porque al faltar profesorado por sustituir el resto de docentes "ha sido catalogado" así.