Búsqueda desesperada de las niñas desaparecidas en Tenerife. Las fuerzas de seguridad piden la colaboración ciudadana para encontrar a Anna y Olivia, de uno y seis años, todo apunta que fueron secuestradas desde el pasado martes por su padre Tomás Gimeno. La situación ha sido calificada de "alto riesgo" por las fuerzas de seguridad que ya saben que el progenitor de las menores habría sacado 70.000 euros de su banco horas antes de desaparecer.
Y es que poco a poco se van conociendo detalles del caso que preocupan y mucho. Él, el padre de las pequeñas, llamó a la que fue su mujer, para comunicarle que jamás volvería a verles, ni a las niñas ni a él. A esto se une una serie de hallazgos que no tranquilizan a los investigadores: el barco de Tomás abandonado a una milla de la costa, una sillita de bebé flotando en el agua cerca del yate que ya se ha confirmado que pertenece a la pequeña Anna, de un año de edad e incluso algún rastro de sangre en cubierta que se están analizando.
Ayer, se reconstruyeron los últimos pasos que pudo dar el padre de las niñas el día de la desaparición. A las nueve y media de la noche del martes, le vieron cargando en su lancha dos bultos enormes. Luego, salió a navegar, pero regresó dos horas más tarde. Estaba nervioso, según cuenta un testigo. Dijo que necesitaba un cargador y lo compró en una gasolinera. Luego, volvió al puerto. Justo a esa hora Beatriz la madre de las pequeñas Anna y Olivia, recibía un siniestro mensaje de despedida.
El guardia de seguridad que hacía el turno de noche ha confirmado que no vio en ningún momento a las niñas en el puerto, ni las cámaras han recogido su presencia.
También se ha conocido que Tomás Antonio Gimeno sacó de su cuenta corriente horas antes de desaparecer con las pequeñas 70.000 euros lo que hace sospechar a os investigadores que su intención era escapar con sus hijas para separarlas de su exesposa de la que se estaba separando de forma traumática.
La madre de las niñas lo había denunciado por amenazas pero en la última revisión del caso hace un mes no se apreció peligro.