Jamie Baker, la madre de Logan Lewis, de 20 años, ha publicado a través de sus redes sociales el terrible accidente que acabó con la vida de su hijo el pasado 5 de diciembre. El joven tenía desde pequeño una alergia potencialmente mortal hacia la leche, por lo que tenía que tener mucho cuidado con los alimentos que tomaba.
El pasado día 5, mientras se encontraba en la universidad, tomó una bebida sin saber que contenía un producto lácteo y sufrió una reacción alérgica por la que falleció. No pudo recibir a tiempo la inyección de epinefrina necesaria, y cuando llegaron los servicios de Emergencias solo pudieron confirmar el fallecimiento.
Su madre ha aprovechado el triste suceso para pedir más concienciación sobre el tema de las alergias, asegurando que la muerte de su hijo no será en vano: "Mi familia trabajará para educar a todos sobre la importancia de comprender su alergia o para ayudarlos cuando se encuentren con alguien con una alergia severa. Tal vez esta conciencia evitará la muerte de otro niño."