Según afirma Ángel Ferrer, alergólogo de Quirónsalud Alicante, la leche y el huevo son los alimentos más frecuentes que provocan alergia en niños menores de cinco años. Tras esta edad, las alergias más comunes provienen de las frutas frescas, los frutos secos y los crustáceos.
También señalaba la importancia de distinguir entre "intolerancia" y "alergia". "La intolerancia se produce por alteraciones en la digestión o el metabolismo de los alimentos, y sus síntomas pueden no revertir en una mayor gravedad que la hinchazón abdominal, los gases y las náuseas. Por su parte, las alergias ponen en juego nuestro sistema inmunitario generando anticuerpos frente a ese alimento provocando cuadros graves que pueden derivar en edema, urticaria y dificultad al tragar y respirar" explicaba.
Una vez identificado el alimento al que se es alérgico, Ferrer recomienda su eliminación por completo de la dieta del paciente y la vigilancia respecto a los alérgenos presentes y ocultos en muchos alimentos procesados y la observación de las etiquetas de los alimentos.
Otros métodos son las vacunas e inmunoterapia consiguiendo que el paciente, como por ejemplo en el caso del melocotón, pueda tolerar el alimento. También encontramos disponibles en el mercado el uso de desensibilizadores orales con los que se consigue transformar en algunas ocasiones los caso de alergia en tolerancia en pequeñas ingestas por ejemplo de huevo, leche o cacahuetes.