El trágico y estremecedor suceso tuvo lugar este jueves 2 de diciembre en el barrio de South Shore de Chicago, Illinois, EEUU. Concretamente, en la planta 11 de un edificio de apartamentos donde una madre llevó a cabo un acto atroz que ha conmocionado y dejado en shock a los vecinos de la localidad.
Era poco antes de las dos de la madrugada del jueves cuando las autoridades encontraban tendidos en el suelo los cuerpos de Aleah Newell, de 20 años, y Amir, su bebé de tan solo 7 meses. Según la investigación policial, su madre le había lanzado por la ventana del domicilio, en aquella planta 11 en la que se contextualizan los hechos. Después, se tiró ella desde lo alto. El pequeño murió en el acto. Ella, por increíble que parezca, estaba en estado crítico cuando la encontraron.
No fue la única atrocidad que cometió. Además de matar a su hijo Amir, antes de lanzarse con el propósito de suicidarse acabó también con la vida de su hijo Jontavius, de 2 años, al que las autoridades encontraron muerto en la bañera del domicilio con cortes en la cara y quemaduras debido a la temperatura del agua, que estaba hirviendo, tal como indica el medio local CBS Chicago, citando fuentes policiales.
Además, en el lugar también encontraron al que sería el abuelo de Aleah Newell, de 70 años, quien estaba sangrando y presentaba también distintos cortes en la cara y el cuerpo. Las autoridades le trasladaron al Centro Médico de la Universidad de Chicago, donde contó a los agentes que la joven le apuñaló y después tiró a uno de los niños por la ventana.
La policía trabaja ahora en esclarecer las circunstancias del terrible suceso.