Dos meses después vuelven a abrirse al público para su uso libre pero manteniendo distancia de seguridad. Ya se puede caminar, hacer deporte, tomar el sol o darse un baño... la mejor forma de llevar la lucha contra la covid-19. Pero no parece que el miedo haya cesado. La isla balear de Formentera ha iniciado este lunes la fase 2 de desescalada del confinamiento, sin la necesidad de regular, por el momento, la afluencia en las playas por la ausencia de turismo y poca población. La presidenta de la administración insular Alejandra Ferrer ha apuntado en declaraciones a los medios que, tras una conversación con la Delegación del Gobierno, “no se considera necesario hacer distribuciones espaciales ni físicas” en las playas, debido a la escasa población y la extensión costera de la isla.
Aun así, Ferrer ha señalado que se está trabajando ya con el Observatorio de Datos del Consell de Formentera para resolver cómo se aplican los controles a las playas en las fases posteriores y durante los meses de verano. La presidenta insular ha apuntado que una aplicación permitirá conocer el flujo de personas que hay en la isla y se podrá decidir así “qué playas precisarán de un control específico y cuáles de controles puntuales”.
Desde el Consell de Formentera han asegurado que en la primera jornada de la fase 2 los concesionarios y los kioscos de playa permanecen cerrados. La presidenta insular, por su parte, ha indicado que la nueva fase se ha estrenado con “muchísima tranquilidad” al no haber demasiadas diferencias con respecto a la semana anterior.
Aún así, a partir de este lunes en la isla de Formentera ya se puede practicar la pesca recreativa, hacer uso lúdico de playas y, en el ámbito de la restauración, los establecimientos pueden abrir su interior con limitación de aforo.
La Gomera, junto a El Hierro y La Graciosa ya tienen sus bares y restaurantes abiertos al 50 %, pueden recibir clientes también en el interior del local pero solo hasta el 40 % de su capacidad. El comercio minorista no sufre cambios, quienes sí podrían reabrir sus puertas son los centros comerciales, teatros y cines, pero ninguna de las islas que comienzan hoy la nueva fase tienen estas instalaciones.