Buena parte de los españoles no pueden permitirse soñar siquiera con la vacaciones, pero quien lo hace ya fantasea con irse a la playa o, al menos, darse un chapuzón en la piscina más cercana. Si el virus no lo tuerce, podremos ir a la playa este verano, pero va a ser, como pronto, en la fase 3 de la desescalada, la última, previsto para el 8 de junio. Los primeros en ir serán los que tienen playa en su provincia. El resto tendrá que esperar unos días más hasta que se pueda viajar. Lo que no sabemos es cómo será el acceso en los arenales más allá de que tendrá que ser en condiciones de seguridad y distanciamiento.
También está previsto que las piscinas abran en esa fase 3 de desescalada. El cloro, a priori, facilitará el baño, ya que su composición afecta a la estructura de los virus. Se da por supuesto que, al igual que en el resto de actividades, habrá que extremar la higiene y la distancia el aforo tendrá que ser suficiente.
Otra de las dudas que plantea este plan de desescalada es qué va a pasar con las las piscinas de comunidades con muchos vecinos. Podrían también abrir a finales del mes de junio. Nuevamente, las condiciones de seguridad e higiene será mucho más estrictas. Por ejemplo algunas comunidades se plantean contratar a un socorrista cuando hasta ahora no era necesario por las dimensiones que tiene la piscina precisamente para controlar el aforo e incluso se plantea la posibilidad de prohibir la entrada de gente de fuera.
Poco antes de publicarse el plan de desescalada, el presidente del Consejo General de Colegios de Administradores de Fincas, Salvador Díez, se dirigió por carta al presidente del Gobierno para reclamarle que de cara a la posibilidad de la apertura de piscinas comunitarias, "adelante y regule cómo hay que gestionar este servicio el próximo verano". También le reclama que este proceso se realice "en todo el país siguiendo las mismas normas, a pesar de la delegaciones de competencias".
Los hoteles, por su parte, podrán abrir en la primera fase pero sin acceso a las zonas comunes que se abrirán en fases sucesivas. Es por eso muchos descartan reabrir en estas condiciones.
En la fase 3 de de las desescalda se prevé asímismo "la apertura de todas las actividades”, pero siempre, recalcan, y como en cada fase, manteniendo las medidas imprescindibles de seguridad y distancia para prevenir el contagio. Entre estas medidas, recoge el ‘Plan de transición a la nueva normalidad’, se contempla “la apertura del comercio minorista que no hubiera abierto con anterioridad, con limitación de aforo, bares y discotecas con aforo muy limitado, museos y espectáculos culturales, también con asistencia limitada”.