Las grabaciones de las cámaras de tráfico y de los locales cercanos a la zona del hallazgo del cadáver de Esther López, que un paseante ha encontrado en una parcela anexa a la carretera de acceso al municipio vallisoletano de Traspinedo, están siendo estudiadas minuciosamente.
La zona donde ha aparecido el cadáver de la mujer de 35 años es un punto visible y bastante transitado por lo que se espera que, además de la autopsia, se obtenga información que permita saber qué ha sucedido con Esther López.
Además, el cadáver no estaba enterrrado y ha aparecido “en superficie” y la zona está “muy próxima” a los lugares donde se había buscado a la joven en las macrobatidas que habían congregado a efectivos y vecinos de Traspinedo, por lo que se investiga si el cuerpo podría haber sido trasladado en las últimas horas.
Así lo han trasladado en rueda de prensa la delegada del Gobierno, Virgina Barcones, y el coronel de la Guardia Civil, Miguel Recio. "Estaba en superficie y no puedo asegurar si lo han dejadono puedo asegurar si lo han dejado. Hacer elucubraciones en estos momentos es complicado", ha enfatizado el coronel de la Guardia Civil, quien ha apuntado que hay que ser "muy minuciosos y hay que hacerlo lo mejor posible para recabar todas las pistas" que permitan esclarecer este hecho.
Virginia Barcones ha recordado que este caso está bajo secreto de sumario y ha indicado que a los primeros a los que se informó de la localización de un cuerpo han sido los padres de Esther.
La delegada del Gobierno ha mostrado su "confianza" en las actuaciones que ha llevado a cabo la Guardia Civil y ha asegurado, que al igual que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado "han estado a disposición para encontrar a Esther, también lo van a estar ahora para esclarecer los hechos".
Por su parte, el alcalde de Traspinedo (Valladolid), Javier Fernández, ha expresado su dolor tras la noticia de la localización del cadáver y se ha sumado a la extrañeza ante el hecho de que el escenario de la localización del cuerpo es una zona por la que ya han pasado las batidas realizadas en los últimos días en el municipio.
"Es muy triste que después de tantos días de búsqueda la hayan encontrado así. Esperemos ahora el curso de las investigaciones para saber si el cuerpo presenta o no daños", ha apuntado el regidor, quien ha anunciado que habrá también que acordar los días de luto en la villa para mostrar el dolor por la trágica muerte de Esther López.
La vecina de Traspinedo, desaparecida el 12 de enero, era buscada desde que sus padres presentaran denuncia el pasado día 17, después de que no diera señales de vida tras haber estado la noche de su desaparición viendo en un bar del pueblo el partido de la Supercopa entre el Barcelona y el Real Madrid y luego continuara la fiesta con unos amigos en casa de uno de ellos y más tarde en unas bodegas.
Esa era la versión que habían facilitado las dos personas con las que estuvo esa noche antes de que se le perdiera el rastro, dos vecinos de Traspinedo, Óscar y Carlos, que viajaron con ella en el coche del primero de regreso a casa y que, según relataron con algunas contradicciones, se detuvo ante el restaurante La Maña.
En el relato ofrecido, Carlos se apeó del vehículo para ir a su casa y luego Óscar y Esther discutieron porque ella quería seguir de fiesta y él la dejó en las inmediaciones, sin que se volviera a saber nada más de la mujer en los últimos veinticuatro días.
Las investigaciones desde entonces se centraron en ambos vecinos y también en un tercer investigado, Ramón G. (El Manitas), pesquisas en las que la Guardia Civil, además de rastrear el municipio mediante batidas en las que habían participado cientos de voluntarios, había tomado muestras de la vivienda del tercero y de los vehículos de este y de Óscar, sin resultado positivo, y había centrado también su investigación en los teléfonos
El único de los investigados que había permanecido privado de libertad es Ramón G cuya detención hubo de prorrogarse durante otras 72 horas aunque finalmente la titular del Juzgado de Instrucción número 5 le dejó en libertad provisional ante la falta de pruebas que atestiguaran su implicación en los hechos.