Debemos evitar a toda costa otro foco que vuelva a golpear a las personas más mayores, esas que ya han convertido en un lugar tristemente común esa coletilla de “los más vulnerables es esta pandemia” que nos ha tocado sufrir. Hoy vamos a conocer a Clotilde. Todo un ejemplo de superación, esta gallega de 87 años no solo ha vencido al virus en la UCI, sino que ahora se enfrenta a la rehabilitación con mucha energía y retomando su vida en casa.
No podía levantar ese brazo al salir de la UCI entre aplausos, pero hoy Clotilde es capaz de subir escalones. Y eso que tenía todas las estadísticas en contra y ella misma no daba un duro porque fuera a salir adelante. “Pedía de morir, le pedí a mi madre, a mi padre, a mis hermanos que están muertos, pero Dios no quiso que no muriera”, comenta.
Los que si creyeron en ella y en su recuperación fueron los sanitarios de UCI del hospital Povisa de Vigo, donde pasó 13 días atada a un respirador desde finales de marzo. Suerte también que había camas libres. “No estábamos sobrecargados, teníamos la unidad disponible para todos los casos y era una persona que trabajaba en su finca previamente, se valía por ella sola y decidimos que había que darle una oportunidad”, comenta Sonsoles Leal, anestesióloga del centro.
Una oportunidad que no ha desaprovechado. Su rehabilitación está siendo asombrosa. “Verla andar es la mejor experiencia de mi vida”, asegura Román, su fisioterapeuta. Tenía la edad en contra pero una salud de hierro a su favor. Hoy puede contar que ha sobrevivido a la pandemia.