Algo debemos estar haciendo mal los padres, educadores y sociedad en general cuando los casos de acoso escolar se suceden y los menores afectados se ven cada vez más solos.
El último caso conocido se ha producido en un colegio de Vallecas, donde los padres de un menor de 14 años y estudiante del instituto público ‘María Rodrigo’, del Ensanche de Vallecas han denunciado que su hijo sufre acoso escolar desde hace más de dos años.
El ‘bullying’ sufrido por un grupo de compañeros ha llegado a tal punto en el que el menor ha sido agredido por éstos. Según ha asegurado la pareja de la madre del niño, lleva padeciendo situaciones de acoso desde que llegó al instituto sin ningún motivo aparente. "Se han cebado con él"
Los insultos y vejaciones no habían llegado a más hasta esta semana. El lunes un adolescente que cursa tercero de la ESO empujó a la víctima en el pasillo del centro escolar, quien le pidió más cuidado. Entonces, el aludido se le encaró y le respondió con un escupitajo.
Un día después, sobre las 13.20 horas del día 18, el mismo alumno le empujó dos veces también en el pasillo, delante del aula, pero esta vez le tiró al suelo y le dio varios puñetazos en la cabeza y en la cara. No le soltó hasta que llegó un profesor.
Ambos tuvieron que bajar a Jefatura de Estudios y tanto la víctima como el agresor recibieron un castigo "por participar en una pelea". El primero se quedó sin actividades extraescolares y con la obligación de estar una hora más en clase, mientras que el segundo fue expulsado dos días.
"Según el reglamento, antes de poner un parte a un alumno tienen que avisar a los padres, que tienen derecho a audiencia. Y tampoco es posible que reciba dos sanciones por un mismo hechos. Criticamos que no nos avisaran de lo ocurrido y que el niño tuvo que permanecer en clase, en vez de ir al centro médico, sin avisar tan siquiera a su madre", se ha quejado Juan.
Al día siguiente, el menor y su madre mantuvieron una reunión con la dirección del centro, que se vio a su juicio "sobrepasada por lo ocurrido". "Estuvieron muy a la defensiva, especialmente el jefe de estudios, porque sabía que no había actuado correctamente", ha añadido el denunciante. El lunes les han convocado a otra reunión.
El padres de la víctima han denunciado que no ha funcionado el protocolo antibullying de la Comunidad de Madrid y que la dirección del colegio y los profesores "estaban al corriente" de lo que ocurría a través de lo que les manifestaba su tutora.
"Mi hijo lleva más de dos años diciéndonos que le da miedo ir al instituto. Ya hace mucho tiempo que mi mujer y yo intentamos solucionarlo, pero en el centro nos decían que no detectaban bullyng ni nada parecido. Prácticamente a diario nos cuenta que alguien le ha insultado, vejado o agredido, pero nunca se detecta nada ni se toman medidas para atajar el problema. Y yo estoy muy harto", contó Juan en redes sociales.
Por todo ello, tras la agresión acudieron al centro médico para recoger el correspondiente parte, que revela que el niño sufría "varias contusiones y chichones nivel parieto occipital bilateral", por los que ha estado en casa en reposo estos días por fuertes dolores de cabeza.
También han denunciado el caso en comisaría e interpondrán un escrito en la Junta Municipal de Distrito de Villa de Vallecas. "Lo que queremos es que la situación evolucione positivamente y que nuestro hijo puede vivir tranquilo e ir sin miedo al instituto. No queremos cambiarlo de centro, porque debe ser el agresor y no la víctima quien se mueva", subrayan.
Por su parte, la dirección del IES María Rodrigo ha informado a la Comisión del Área Territorial de Madrid de la Consejería de Educación de la Comunidad que tuvieron constancia de la supuesta situación de acoso escolar de este escolar el mismo día de la agresión, tras la interpusieron un parte de incidentes, han indicado a Europa Press fuentes de la Consejería.
Efectivamente, el centro ha confirmado que el agresor fue sancionado con dos días de expulsión y que al día siguiente convocaron a la víctima y a su madre, "que fue en ese momento cuando denunció supuestas situaciones de acoso a su hijo”. Entonces, activaron el protocolo de acoso para investigar este caso.
Según la guía de actuación contra el acoso escolar en los centros educativos de la Comunidad, el proceso se inicia con la notificación al director del instituto de la existencia de indicios de 'bullying' a un alumno del centro. Con carácter inmediato, el director designará a dos docentes para obtener la información necesaria a través de datos e indagaciones que determinen la existencia o no de caso.
Si hay evidencias de acoso, la dirección del colegio pondrá en marcha el Plan de intervención, que incluirá las medidas urgentes y/o cautelares destinadas a garantizar la seguridad de la víctima y también actuando sobre el acosador, la familia de ambos, el equipo docente y grupos de alumnos espectadores.
Además, de acuerdo con la Ley de Protección Jurídica del Menor, el director dará traslado de la situación de acoso escolar a la Fiscalía de Menores. El informe final será entregará a la Dirección del Área Territorial de Educación.