Un hombre de 44 años, cuya identidad no ha sido revelada, intentó llevarse a una niña de dos años de un parque de juegos en la capital alemana, Berlín, aprovechando que la madre estaba distraída en una conversación. Los hechos ocurrieron este domingo por la tarde.
El individuo fue perseguido por una mujer de 27 años y por el dueño de una tienda, quienes le grabaron y le obligaron que regresara para devolver a la pequeña, a la cual su madre, aterrada, estaba ya buscando. Posteriormente, el hombre fue arrestado por estar ebrio, pero la policía lo liberó más tarde asegurando que "no se cumplieron las condiciones para emitir una orden de arresto".
Heike S., quien habló con el periódico alemán Bild con la condición de que cambiaran su nombre, dijo que se percató por primera vez del hombre cuando hablaba con la niña cerca de la entrada del parque de juegos y comenzó a mirar porque ambos "no se parecían".
De repente, el hombre tomó a la niña de la mano y comenzó a huir, incitándola a seguirla a pesar de tener a su propia pequeña de dos años con ella. La niña raptada no se resistió, pero Heike estaba convencida de que el hombre no era su padre. Cuando comenzó a alejarse, ella contó con la ayuda del propietario de un quiosco local, Zoran Z, de 44 años.
Éste logró alcanzarle y le hizo frente mientras le grababa con su teléfono móvil. Zoran señaló que le preguntó si la niña le pertenecía, y que después de una breve pausa admitió haber tomado a la pequeña. "Amo a los niños. No puedo entender cómo las madres y los padres dejan a sus hijos en casa con algunos cuidadores", recordó Zoran que le afirmó el hombre.
Una vez de vuelta en el parque, el secuestrador, al ser arrestado, rechazó una prueba de aliento. Luego se confirmó, a través de una muestra de sangre, que se encontraba en estado de embriaguez. Es conocido por los agentes y tiene enfermedades mentales, informó Bild, pero no es un pedófilo o delincuente sexual conocido.
El caso pasó a una unidad especializada en delitos infantiles, que lo investiga bajo sospecha de intento de secuestro. También se ha notificado a una unidad psiquiátrica y se está examinando si el hombre es susceptible de ser ubicado en una unidad segura. Los lugareños ahora han colocado señales de advertencia fuera del patio de recreo.