Las conversaciones de los canteranos del Real Madrid acusados de difundir un vídeo sexual: "Se nos puede caer el pelo"

  • La Guardia Civil ha rescatado las conversaciones de los canteranos del Real Madrid acusados de difundir un vídeo sexual

  • La UCO ha volcado la información de sus teléfonos móviles y ha recuperado una multitud de conversaciones

  • En algunos mensajes los canteranos expresaban su miedo a poder ser pillados por las autoridades

La Guardia Civil ha recuperado las conversaciones de los cuatro jugadores canteranos del Real Madrid investigados por la difusión de un vídeo sexual de una menor de 16 años. La UCO ha volcado la información de sus teléfonos móviles y ha recuperado una multitud de conversaciones en las que hablan de lo ocurrido.

En algunos de los mensajes, recogidos por 'En boca de todos', califican a la menor como "una perra": "Para lo guarra que era, no cumplió ni 17 esa, vaya guarra".

Además, en los mensajes presumían de los fuertes golpes que realizaban durante el acto sexual: "No eres consciente de las hostias que pegábamos, el culo y la cara rojos... Hay una que parece un tomate de los bofetones".

El miedo de los futbolistas tras difundir el vídeo sexual

El Confidencial ha recogido en exclusiva más mensajes en los que los canteranos expresaban su miedo a poder ser pillados por las autoridades después de difundir el vídeo sexual. Uno de ellos llega a asegurar que "como se filtren esos vídeos, la hemos liado".

En otro mensaje se lee la preocupación de uno de ellos: "Escucha, a mí Juan me da un miedo con los vídeos estos, es el típico que los va pasando y la liamos", y después la advertencia que le lanza al otro canterano: “Tú, los vídeos no se los pases a nadie, eh. Que se nos puede caer el pelo".

Los hechos

Las detenciones derivaron de la denuncia presentada en Gran Canaria por una mujer tras descubrir que circulaba por WhatsApp un vídeo de su hija, de 16 años, manteniendo relaciones sexuales.

Los hechos ocurrieron en Mogán (Gran Canaria) a principios del pasado verano, y la madre, acompañada de su hija, denunció la existencia de unas grabaciones que contenían relaciones sexuales consentidas de su hija, pero que fueron grabadas sin su consentimiento y circulaban por redes.

Semanas después una segunda mujer también presentó una denuncia ante la Guardia Civil por presuntos delitos contra la intimidad y revelación de secretos por este caso porque ella tampoco “otorgó su consentimiento para la grabación ni la difusión del archivo de vídeo”.

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