En 2022, la Dirección General de Tráfico (DGT) previó más de 90 millones de desplazamientos de largo recorrido en el territorio español, lo que da una buena muestra de la cantidad de coches que transitan por las carreteras en los meses de julio y agosto. Ante tal ajetreo, no es de extrañar que haya muchos conductores que en algún momento olviden llevar el carnet de conducir mientras circulan.
Este hecho es motivo de sanción en caso de que un agente de la Guardia Civil o de la Policía Municipal lo requiera. Por lo tanto, antes de ponerse en marcha conviene comprobar si se lleva encima el documento o no.
La DGT enumera los “tres documentos que debes llevar, y estar en vigor, obligatoriamente cuando conduzcas, para todo tipo de trayectos: Permiso de Conducir del conductor, Permiso de Circulación del vehículo y Tarjeta de Inspección Técnica (ITV) del Vehículo”. No en vano, “será lo primero que te pida un agente si te para o te ves involucrado en un incidente”, añade. Si bien es cierto que la multa por no llevar el carnet de conducir no es muy elevada –10 euros–, esta puede ser mayor si hay algún dato incorrecto.
Afortunadamente para los más olvidadizos, las nuevas tecnologías ayudan a paliar estos pequeños errores. Y es que desde que en 2020 la DGT puso en marcha la aplicación para móviles MiDGT, es posible llevar el carnet de conducir digitalizado. Esto supone que no es necesario mostrar la versión física, dado que para los agentes será suficiente la copia que aparece en la app.
No obstante, siempre recomiendan llevar el carnet habitual, ya que hay ocasiones en las que el teléfono no tiene cobertura o se queda sin batería, lo que impedirá la comprobación de los datos y, por lo tanto, la consecuente sanción económica. En este punto hay que señalar que no servirá ningún otro documento, incluido el DNI.
Además de la multa por no llevar encima el carnet de conducir o por tener datos incorrectos o desactualizados, hay otras sanciones que conviene tener presentes. Por un lado, cuando el permiso de conducir está caducado, se considera una falta grave y la multa ascenderá a 200 euros, aunque no supondrá ninguna pérdida de puntos. Por lo tanto, conviene tener muy presente la fecha en la que caduca, pues puede salir muy caro un retraso.
Por otra parte, las sanciones se endurecen si se conduce sin tener permiso, es decir, si en ningún momento se ha obtenido el carnet. En ese caso, la multa asciende a 500 euros y la inmovilización del vehículo. Es más, en caso de que sí se tenga carnet pero haya sido retirado, se perderán además otros cuatro puntos. Finalmente, circular con un documento falsificado es un delito de otro tipo que puede conllevar penas de prisión de seis meses a un año.
Así pues, cuando se coge un coche, nunca hay que olvidar llevar el carnet de conducir y que esté en regla.