{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
La Dirección General de Tráfico (DGT) prosigue con la campaña propuesta para reducir la siniestralidad en las carreteras puesto que, en lo que llevamos de año, ya se han producido 231 accidentes mortales. Entre otras medidas que preocupan a los conductores, como el acceso de algunos coches a las zonas de bajas emisiones, se encuentra el peligro de perder puntos o el carnet completo por cometer alguna infracción; en este caso, la DGT avisa de que podría retirar el carnet a todos aquellos conductores que padezcan ciertas enfermedades.
En Valdemoro un conductor puso en peligro la vida de otros conductores cuando fue interceptado conduciendo borracho, sin carnet, hablando por el móvil, sin seguro y sin ITV.
La DGT ha iniciado una campaña para reducir la siniestralidad en carretera que va destinada a aquellos conductores que sufren determinadas enfermedades, ya que circular con un determinado tipo de padecimiento aumenta el riesgo de cometer infracciones y de sufrir un accidente.
Por ello, la DGT ha publicado una lista de enfermedades que, en caso de padecer alguna de ellas, puede provocar la retirada del carnet de conducir. Antes de renovar el carnet de conducir se realiza un examen médico que evalúa el estado del conductor, además, el médico encargado debe de conocer el historial médico del conductor. Tráfico matiza que "no todas las enfermedades deterioran en la misma medida la capacidad de conducir, ni todos los conductores sufren el mismo deterioro". Es decir, la prohibición de conducir en algunos casos dependerá de la gravedad de la enfermedad, así como del tratamiento que esté recibiendo el conductor y de las consecuencias que presente para la salud del paciente.
Los pacientes que padezcan alguna de estas dolencias no podrán ni obtener el carnet de cero, ni renovarlo, a menos que cuenten con un informe médico que certifique su aptitud para conducir.
El riesgo de que un conductor de edad avanzada con alguna de estas afecciones cometa una infracción es de 2,5 a 8 veces mayor que en personas sanas. Además, aquellos que utilicen el vehículo con resultados médicos desfavorables se pueden enfrentar a sanciones que alcanzan hasta los 6.000 euros.