Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado martes 27 de junio a una turista, de origen irlandés y 45 años, como presunta autora de un delito de abandono de menor, al dejar a su hija sola en un hotel de Manacor, en Mallorca, donde pasaban unas vacaciones.
Según ha informado la Policía en una nota de prensa, los hechos empezaron a ocurrir desde el primer día en que la mujer y su hija menor de cinco años de edad llegaron a un hotel de Manacor. Al parecer, desde el primer momento la adulta comenzó a consumir alcohol en grandes cantidades.
La mujer solo bebía cerveza, desde que se levantaba por la mañana hasta que se acostaba. Por eso, la niña pasaba a ser cuidada por otros turistas, que se habían conocido en el mismo hotel y que, además, también tenían una niña menor.
Estos turistas tenían que dar de comer a la menor, ponerle crema solar, vigilarla en la piscina, comprarle unos manguitos para la piscina, ducharla y evitar así males mayores, entre otras cosas.
La mujer se quedaba dormida siempre o encima de una hamaca o en la mesa debido a la gran cantidad de alcohol que consumía. Hasta tal punto llegaban sus borracheras que el personal del hotel dejo de servirle alcohol.
Pese a la decisión del personal del hotel, la mujer se desplazó hasta el supermercado de enfrente y siguió comprando cerveza para consumirla en el interior del establecimiento hotelero.
Así fue hasta el pasado martes, cuando los testigos de lo ocurrido optaron por dar conocimiento a los responsables del hotel, que decidieron dar aviso a la Policía.
Cuando los agentes llegaron al lugar, subieron a la habitación de la presunta autora, que tras un rato sin abriles la puerta, decidió acceder y dejarles pasar. Como en todas las demás ocasiones, la mujer se encontraba en situación de embriaguez, costándole aguantar el equilibrio.
Los agentes le expusieron a la mujer los hechos de los que se le acusaba. Sin embargo, ella negaba todo tipo de acusación. No obstante, los agentes de la Policía pudieron comprobar por ellos mismos que desde la habitación emanaba un fuerte olor a alcohol.
Por ello, se procedió a la detención de la mujer como presunta autora por un delito de abandono de menor. Esta última, por su parte, fue trasladada hasta un centro de primera acogida, hasta el día siguiente, cuando su padre, que estaba en Irlanda, viajó hasta la isla para hacerse cargo de ella.