Un hombre se ha atrincherado este viernes en una vivienda de la localidad de Burriana (Castellón) armado con una escopeta y después de varias horas en el interior ha sido hallado muerto. Miembros del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil han accedido a la vivienda tras intentar negociar con el varón y han confirmado su fallecimiento.
Los servicios de emergencia del 112 habían recibido un aviso este mediodía donde indicaban que se habían oído gritos y una fuerte discusión en un domicilio de la calle Islas Baleares del municipio. Los negociadores se han desplazado poco después hasta el lugar para intentar que se entregara, pero ha permanecido en el domicilio. Los hijos y la esposa del hombre, así como sus mascotas, habían abandonado el bloque, no se encontraban en el lugar en el momento de su muerte.
La Guardia Civil, entre los nervios y la tensión de los vecinos, esperaba que el hombre se entregara o pudieran detenerlo por la fuerza, dado que estaba armado con lo que, a priori, parece ser una escopeta, recogen fuentes como 'El Periódico Mediterráneo'. Se había acordonado la zona y se habían desplazado más efectivos de la Benemérita. Sin embargo, el varón ha terminado quitándose la vida.
La localidad de Burriana ya fue testigo a principios de este mes de un suceso muy similar al de esta jornada. Un hombre armado provocó tensión al amenazar con disparar a unos niños desde su ventana. Al parecer, estaba molesto por el ruido que causaban. Los agentes acordonaron la zona, negociaron con el varón y fue arrestado.