¿Cómo saber si un panel de la DGT esconde un radar?

Para muchos conductores que acostumbran a correr más de la cuenta, los radares que controlan la velocidad –además de otras posibles infracciones– suponen un auténtico dolor de cabeza. Por eso, no es de extrañar que busquen todas las opciones posibles de detectarlos para evitar cualquier cuantiosa multa por exceso de velocidad.

Antes de apuntar cómo es posible saber si un panel de la DGT esconde un radar, hay que recordar que no se deben sobrepasar los límites de velocidad, ya que su labor es reducir los accidentes que se producen en las carreteras españolas. 

Y aunque los conductores tienden a quejarse de las normas y, sobre todo, de las multas –incluida la pérdida de puntos–, lo cierto es que la cifra de accidentes ha descendido considerablemente desde los años 90 del pasado siglo. Por poner solo unos ejemplos, de acuerdo con los datos de la Dirección General de Tráfico publicados por epdata, en agosto de 1991 hubo 706 fallecidos por accidente de tráfico, 316 en ese mismo mes en 2005 y 94 en 2022.

Detectar un radar en un panel

Dicho todo lo anterior, la DGT dispone de radares fijos y móviles en todo el territorio español para controlar que se cumplan las normas de velocidad. Es más, algunos de estos dispositivos también son capaces de detectar si el conductor está utilizando el teléfono móvil mientras circula, si los ocupantes llevan puesto el cinturón de seguridad e incluso si el coche tiene la ITV pasada teniendo en cuenta la pegatina que debe estar colocada en la parte superior derecha del parabrisas.

La mayoría de esos radares se encuentran situados en el arcén, aunque hay algunos que se colocan en los paneles informativos que podemos ver en numerosas carreteras. No en vano, hay unos 2.200 de estos en todo el territorio nacional.  

Pistas para saber si hay un radar

Si bien los radares colocados en el arcén se pueden ver fácilmente, los situados tras los paneles informativos es casi imposible detectarlos a simple vista. Por eso, hay que fijarse en un par de detalles.

  • En primer lugar, todos los radares fijos deben estar señalizados con anterioridad. La DGT está obligada a hacerlo unos metros antes de pasar junto a ellos o por debajo, en el caso de los pórticos. Así que, si aparece una señal avisando de la presencia de uno, obviamente estará o a un lado de la calzada o en alguno de los paneles que nos encontramos en nuestro camino.
  • En segundo lugar, para quienes se fijan hasta en el más mínimo detalle, los pórticos que cuentan con un escalera lateral probablemente también tengan instalado un radar. Estos equipos requieren un mantenimiento habitual, de modo que necesitan un acceso sencillo que lo haga posible, con lo que su presencia supone una pista para quienes desean conocer el punto exacto del control de velocidad.

Finalmente, hay que señalar una tercera opción, más sencilla que las anteriores pero que supone conocer el recorrido que se va a realizar. Y es que en la web de la DGT es posible informarse de antemano sobre la ubicación de todos los radares que hay colocados en las carreteras españolas.