La vacuna contra el cáncer de 2030 que "cambia el software de la vida": personalizada y para muchos tumores
En 2030, si todo sale bien, podría haber una vacuna contra el cáncer de piel más avanzado
Cada tumor y cada sistema inmune reacciona de manera diferente, por eso, estas vacunas terapéuticas serán personalizadas
El tratamiento con una vacuna de ARN mensajero desarrollada por Moderna, en combinación con la inmunoterapia reduce en un 44 por ciento el riesgo de recaída o muerte por melanoma
Para 2030, Moderna ha "anunciado" que tendrá su primera vacuna contra el cáncer. Sin embargo, ¿realmente está tan cerca? Hablamos de vacunas contra el cáncer, pero ¿para todos los cánceres? De momento, no. Moderna está trabajando con los melanomas más agresivos en estadios avanzados y acaba de anunciar resultados de su ensayo en fase 2B. Son muy prometedores. Pero, hay muchos tipos de cánceres y, sobre todo, cada persona recibe ese cáncer de manera distinta. De ahí, que estas vacunas vayan a ser personalizadas. No es una vacuna para prevenir el cáncer sino para tratarlo, y si se puede curarlo.
"Es una muy buena noticia, circunscribiendo esta noticia a los resultados preliminares que hay en melanoma avanzado, creo que no podemos hablar de una vacuna para todos los tipos de cánceres", ha asegurado María Casanova Acebes, jefa del grupo de inmunidad del cáncer del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO).
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Conclusión, en 2030, si todo sale bien, sí habrá una vacuna contra el melanoma avanzado, una solución terapéutica, como le gusta llamarlo a Juan Carlos Gil, director general de España y Portugal de Moderna. "Creo que la denominación va a ir cambiando con el tiempo", dice. "Este término es muy genérico, engloba todo, pero lo más importante es que va a ser personalizada. Por ejemplo, para Juan Fernández Fernández y el tumor concreto que tenga Juan Fernández Fernández".
¿Por qué se llama vacuna si no es preventiva?
Cuando hablamos de vacunas y cáncer, se trata de "vacunas terapéuticas, es decir, cuando ya tienes cáncer, utilizas la vacuna”. ¿Por qué se llaman vacunas, entonces? "Porque la estrategia es la misma que en el resto: hacer que el sistema inmune reaccione. No contra un agente patógeno en concreto, sino contra el cáncer", explica Casanova.
"En este caso concreto se van a inocular a los pacientes con una molécula de ARN mensajero que genera una serie de antígenos nuevos para crear una respuesta inmunitaria que es lo que realmente se quiere. Es una vacuna porque se inocularía una forma nueva de reactivar el sistema inmunitario", dice.
Jaime Pérez, presidente de la Asociación Española de Vacunología, quiere dejar claro que todo avance es una gran noticia, pero "no podemos decir que se vaya a vacunar contra el cáncer y se cura. No es una vacuna como la del papiloma humano, que puede transformarse en cáncer de cuello de útero y al vacunarte evitas esa posibilidad. En este caso estas terapias hacen que, si el tumor crece o quiere hacer metástasis en otra parte, nuestro cuerpo esté preparado, lo identifique y pueda combatirlo. Da herramientas al sistema inmune para combatirlo, pero siempre que el cáncer haya aparecido".
Inmunoterapia
Según el director general de Moderna este tratamiento se puede englobar dentro de la inmunoterapia, pero es distinto. En el tratamiento con inmunoterapia se introducen factores exógenos en el cuerpo que son los que combaten las células oncológicas. "En lo que nosotros estamos, lo novedoso es que hemos conseguido mandarle un mensaje al cuerpo para que trabaje contra esas células tumorales. Es el software de la vida. Hemos sido capaces de decodificar el lenguaje que entiende nuestro cuerpo para producir a nuestro favor, esa propia solución terapéutica. Identificamos las células tumorales, y a través de un algoritmo, seleccionamos una cadena de ARN mensajero que va a enviar una instrucción a las células del cuerpo para producir una proteína que evite el crecimiento de esas células mutágenas del tumor", asevera.
Desde el CNIO, aclaran que el melanoma avanzado responde muy bien a la inmunoterapia en el 60% de los casos, pero todavía hay un 40% de pacientes que no responde al tratamiento. Una de las ideas por las que se cree que no responden es porque el sistema inmune ya no crea nuevos antígenos, que es lo que le hace estar alerta de que algo va mal. Por eso, esta vacuna de ARN mensajero, con la que trabaja Moderna, se está viendo en los ensayos clínicos que hace reactivar el sistema inmune y crea nuevos antígenos. La combinación del tratamiento actual y el nuevo puede hacer que el grupo de pacientes que no responde, empiece a hacerlo. A veces se necesitan dos ejes de acción.
Resultados prometedores
"Los resultados son súper prometedores", dice Gil. Se ha ensayado en 157 pacientes con el melanoma más agresivo y el riesgo de concurrencia o muerte se ha reducido un 44%, según datos del último Congreso. Asegura, que este estudio se ha convertido en la primera demostración de un tratamiento oncológico que utiliza esta tecnología de ADN, y esto ha dado pie a que la Agencia Española del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) declare como medicamento prioritario a nuestro producto contra el melanoma avanzado.
A pesar de estos resultados tan prometedores los expertos coinciden en que la fecha de 2030 no se va a adelantar. La propia Moderna dice que 2030 ya es un compromiso muy serio. El director Programa de Biotecnology, Fernando Peláez, es cauto, "Si esto sale adelante, que ojalá, dará solución a muchos pacientes, pero a no a todos. Aún quedan años de desarrollo". Lo mismo creen desde el CNIO, "veo complicado que esté antes porque se necesitan técnicas que hacen muy complejo que esa fecha se acelere. Además, hay que garantizar la efectividad de las vacunas".
¿Y, los demás tumores?
Desde Moderna aseguran que el del melanoma es el más avanzado, pero se está trabajando con más tumores y con la misma base, el ARN mensajero. "Llevamos 13 años trabajando con la misma tecnología de la vacuna contra la covid que podría evitar, en un futuro cercano, muertes por el cáncer de piel más grave".
Otro de los tumores que también está dando resultados es el de próstata. "Pero seguimos sin saber porque para otros no funciona. La mayoría con los que se investiga son tumores sólidos, de pulmón, de cabeza, cuello, hígado, de momento, no hay resultados y este es el escenario más complejo. Se desconoce porque las células de estos tumores no alertan de que hay algo mal", dice Casanova.
En el caso del melanoma las células tumorales alertan al sistema inmune y lo expresan con una serie de proteínas (antígenos). Por eso, el ARN mensajero funciona, porque consigue que se produzcan nuevos antígenos y se reactive el sistema inmune. Pero con los otros tipos de cánceres no avisan a tiempo, tienen unas particularidades que no producen estas proteínas, y cuando te das cuenta es tarde", concluye Casanova.
"Lo bueno es que el mecanismo es el mismo, por eso, si finalmente se consigue, que esperemos que sí, esto va a apoyar como terapia en muchos tipos de tumores, se abre una ventana esperanzadora", asevera el presidente de la Asociación Española de Vacunología.