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Abrumada por el gran revuelo mediático que ella misma ha originado con su extraordinario reto, Beatriz Flamini, sonriente y emocionada, ha concedido una rueda de prensa en la que ha explicado y relatado cómo han sido sus 500 días en el interior de una cueva de Motril, Granada, en la que ha batido un histórico récord mundial.
Tras casi un año y meido a 70 metros de profundidad, en un lugar al que no llega la luz solar, sin contacto con el exterior, sin ninguna referencia temporal y completamente sola, aunque vigilada desde fuera por un equipo al que no ha dejado de darle las gracias, la deportista de élite, alpinista y escaladora ha contado que la experiencia ha sido “excelente” e “insuperable” y que “nunca” pensó en abandonar.
Enfrentándose al shock de haber estado 500 días sin hablar con nadie y tener ahora que enfrentarse a toda una oleada de preguntas en la rueda de prensa, con multitud de periodistas deseosos de hacerle preguntas, Flamini expresaba: “Llevo mucho tiempo sola, –mucho tiempo sin hablar–, y no puedo saturarme. Perdonad”.
Era una búsqueda de cierta condescendencia y solidaridad tras un desafío tan exigente, pese a que lo ha superado con la mayor de las enterezas asegurando: "No quería salir".
Recalcando que, pese a que sí han existido dificultades lo ha "disfrutado", ha señalado ante todos que ya está pensando en el próximo reto.
Haciendo explícita su sensación de shock ante tanta pregunta nada más salir de la cueva, la deportista ha protagonizado un gracioso instante cuando le han preguntado cómo ha sido cumplir los 50 años en el interior de la cueva.
“¿Los 50? Los 500", ha contestado, pensando que había un error de la periodista, instante en que le han especificado que le estaban preguntando por su edad y no por los días en el interior de la cavidad: –“¡Ah, vale, los 50!, ha contestado entonces, echándose a reír y desatando las carcajadas entre todos en la sala.
De hecho, esa ha sido la tónica que ha predominado en la rueda de prensa: la de la alegría, las risas y los aplausos por el logro conseguido por Beatriz.