Así es la vida del piloto del helicóptero Pegasus de la DGT accidentado en Madrid

El piloto del helicóptero Pegasus de la Dirección General de Tráfico (DGT) accidentado el pasado domingo 5 de marzo en Robledo de Chavela (Comunidad de Madrid), que dio positivo en cocaína y anfetaminas tras el siniestro, está "muy enfadado" por las informaciones que se están publicando, según ha informado su abogada. El hombre, de 60 años, ha decidido eliminar sus redes sociales y, según varios informes, apenas frecuenta su domicilio, a unos 30 kilómetros del lugar de los hechos.

Así lo recoge 'El Mundo'. Según el rotativo, el despacho SDG Abogados, que representa al piloto, afirma que "se han dicho cosas inciertas" que dañan al "honor" y la "imagen" de su cliente. Dicen que su "trayectoria es intachable" y que "en ningún momento, como se ha dicho, huyó del lugar del accidente". "Se le han imputado delitos que no ha cometido, todavía no se ha judicializado", han sentenciado respecto el caso que está dando tanto que hablar.

El accidente del helicóptero Pegasus de la DGT en Robledo de Chavela

Todo ocurrió el pasado domingo 5 de marzo. El piloto salió con la aeronave, en la que viajaba el operador del radar y su mujer (que se consideraría una persona no autorizada para ir a bordo), desde el aeródromo madrileño de Cuatro Vientos. Así, unos 40 minutos después, al perseguir a un motorista por una infracción, el helicóptero acabó estrellándose contra el suelo. Los tres se encuentran bien, a pesar del aparatoso incidente.

Las primeras investigaciones apuntaron a un fallo mecánico que obligó al hombre a realizar un aterrizaje de emergencia que no fue capaz de completar con éxito. Es aquí cuando inicialmente se informó de que el piloto huyó del lugar, quedándose solo el operador del radar -al que encontraron los agentes a su llegada-. Se sigue investigando lo ocurrido. Él dice que perdió el control al intentar retomar el vuelo. Un especialista forense sería el encargado de determinar si el incidente fue provocado por estar bajo la influencia de drogas, no sería relevante si las consumió, a diferencia de lo que hay que determinar con un conductor de coche.

El positivo en drogas del piloto abre un debate sobre la reclamación de las denuncias en las que participó

Los que conocen al piloto hablan de un hombre familiar, que se llevaba bien con sus vecinos de urbanización -a los que conocía desde hace más de una década-. Aseguran que no parece un individuo que consuma drogas y, de hecho, siempre se ha mostrado junto a sus hijos y sus mascotas, especialmente en la época de verano, con fiestas en la piscina.

Es un bombero en excedencia de la Comunidad de Madrid y comenzó a pilotar helicópteros de la DGT en 2019. La fuente citada asegura que participó en 3.608 denuncias desde su ingreso al cuerpo. Ahora, algunos expertos aseguran que su positivo en drogas abre un debate sobre la reclamación de las denuncias en las que ha participado a lo largo de su trayectoria. Además, se afirma que utilizó el helicóptero incluso para dar "paseos".