El fallecimiento de Lucile Randon, más conocida como hermana André, a los 118 años de edad, ha hecho que volvamos a interesarnos por la longevidad y sus secretos. El caso bien documentado de esta monja francesa no es el único ni el record. El ser humano que más tiempo ha vivido, y del que hay constancia documental, fue Jeanne Calment, otra francesa que nació en 1875 y murió en 1997, a los 122 años. Puede ser una casualidad que ambas fueran francesas. Lo que no es casual es que de las 100 personas más ancianas conocidas, 97 fueran mujeres y sólo tres, hombres.
España tiene a tres personas en esa lista. Y las tres son mujeres. Una de ellas, María Branyas, se ha convertido, tras el fallecimiento de la hermana André, en la persona viva más anciana del mundo. Tiene 115 años y vive en una residencia de mayores de Olot, Girona. Nuestro país es una potencia en este terreno.
Actualmente, las estadísticas del INE reflejan que hay más de 18.000 centenarios. Una gran cifra si tenemos en cuenta que en 1998 no llegaban a tres mil quinientas. Uno de estos supercentenarios, recién ingresado en este selecto club, es Eugenio Ropero, que cada día se mueve en bicicleta por Maribañez, un pequeño pueblo sevillano de colonización del que él fue el primer habitante.
“Supercentenarios: el secreto de la vida” es el título de esta nueva entrega de A ver si me he enterado, el videopodcast conducido por Miguel Ángel Oliver en NIUS. Además de la charla con Eugenio, también intervendrá el doctor Francisco Robles, Agudo, especialista en Geriatría del Hospital la Paz.
Según su diagnóstico, hay tres factores que contribuyen a pasar el umbral de los cien años: herencia genética, hábitos saludables y entorno. Sin ellos es difícil alcanzar estas cifras, aunque el ser humano esté preparado genéticamente para acariciar los 126 años. Si concurren todos, ya saben, la esperanza es lo último que se pierde. Disfruten de la charla con Eugenio.