El bebé de 22 meses de Manzanilla, en Huelva, que fue encontrado el pasado jueves junto a su abuelo tras desaparecer ambos el día previo continúa muy delicado.
El pequeño se encuentra ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Virgen del Rocío de Sevilla, y según ha informado el periódico 'Huelva Información', parece ser, que el niño va mejorando poco a poco.
El periódico andaluz ha conseguido ponerse en contacto con Cristóbal Carrillo, el alcalde de Manzanilla, que se encuentra totalmente informado de la situación del niño. Al parecer, el equipo médico ha decidido ir reduciéndole poco a poco la medicación con la que se encuentra ingresado Daniel.
"Le están reduciendo la sedación y está respondiendo a los estímulos que le están dando. Aunque aún queda, al menos se ve una pequeña mejoría y sigue avanzando", informaba el alcalde de Manzanilla al periódico encargado de dar la noticia.
María, la madre del pequeño Daniel, explicaba durante a los medios de comunicación durante la mañana del sábado 10 de diciembre que a su hijo "la falta de oxígeno" por "estar encerrado durante muchas horas en el coche" donde fueron encontrados tanto el bebé como su abuelo.
La madre explicaba que cuando se encontraron al menor estaba "en coma por hipotermia e hipoglucemia", pero su estado se ha derivado de la "falta de oxígeno al estar encerrado tantas horas en el coche". El bebé, según sus palabras, "está bien por ahora" aunque "hay que esperar a ver qué es lo que pasa", pero "no está tan grave ni lo han operado de nada".
Según la propia madre, los médicos "creen que el niño se va a recuperar, y que vamos a poder salir de esta, que el niño va a salir corriendo del hospital", al tiempo que ha confirmado que las pruebas de toxicología practicadas al menor "han dado negativo".
Sobre lo ocurrido, la madre aseguraba no saber nada. A su juicio, "seguramente" el abuelo "estaría mal en todo momento y se le fue la cabeza".
Durante la mañana del sábado 10 de diciembre, María aseguraba que su hijo de 22 meses había pasado la noche "mejor" y que había despertado con "mejor color. Delante de los medios de comunicación y a las puertas del hospital Virgen del Rocío de Sevilla, María, la madre del pequeño Daniel de 22 meses, celebraba que "al menos esto es un pasito más" en la evolución de su hijo.
Los padres del pequeño, rotos de dolor, concedían unas palabras a los medios de comunicación congregados en las puertas del hospital sevillano. María, la madre de Daniel, comentaba que el pequeño continuaba igual.
Además, los progenitores del bebé de 22 meses que desapareció junto a su abuelo aseguraban que, aunque están completamente devastados, no pierden la esperanza. Por eso, tanto María como el padre del niño confían en que Daniel mejore en las próximas horas.
Según informaban a EFE fuentes del hospital, el menor, que cumplirá dos años el próximo febrero, continúa en la UCI del centro hospitalario, donde ingresó tras ser atendido. Fuentes cercanas a la familia explicaban que los médicos están preocupados por las secuelas que le puedan quedar al pequeño, con posible daño cerebral, aunque han informado a los padres de que lo prioritario es observar su evolución.
Por su parte, desde la Guardia Civil se ha abierto una investigación para esclarecer las circunstancias de la desaparición así como lo sucedido posteriormente, que llevó al pequeño a ese estado y al abuelo a la muerte.
Abuelo y nieto desaparecieron el miércoles después de que salieran en un coche, un Skoda Octavia color negro, en el que fueron encontrados al día siguiente por unos vecinos en un camino del término municipal de Villarrasa.
El abuelo fue trasladado por los servicios sanitarios hasta el hospital Infanta Elena de Huelva, aunque falleció antes de llegar. La autopsia realizada al hombre ha descartado el suicidio como motivo de su muerte.
Según ha informado a EFE el alcalde de Manzanilla, Cristóbal Carrillo, "tras el informe de la autopsia que se le ha dado a la familia queda descartado el suicidio y puede que la muerte le viniese por desvanecimiento por hipoglucemia".
La hipótesis del suicidio fue barajada por la propia familia ya que el fallecido se encontraba en tratamiento psicológico por depresión. El alcalde ha indicado que esta persona era diabética, por lo que "todo parece indicar que hubiera sufrido un episodio de hipoglucemia y hubiera perdido la consciencia".
"Es posible que se desorientara por la lluvia por los caminos y tras varias horas acabara con un episodio de falta de insulina que le habría provocado la pérdida del conocimiento", ha dicho.