El pago por el uso de las autovías es un alivio para los países, que no tienen que costear con las arcas públicas los servicios de mantenimiento. Por ello, el Gobierno de España, que recibirá unos 70.000 millones de euros de la Unión Europea a cambio de instaurar un sistema de peajes que tarifique las vías de alta capacidad, ya ha comenzado a trabajar. La idea es que dicha media, no muy del agrado de la sociedad, lógicamente, esté completamente operativa en 2024, tal y como indica la Ley de Movilidad Sostenible y se confirmó a Europa el año pasado.
Una de las personas que ha defendido la idea de imponer peajes en todas las autovías en el futuro es el máximo responsable de la Dirección General de Tráfico (DGT), Pere Navarro, quien señala que "el que lo usa lo paga".
El País Vasco ha tomado la delantera de este proyecto y va a incorporar nuevas carreteras de pago a la ya operativa y conocida como autovía Deskarga, según señala 20 minutos. Así, de cara a 2023, se prevé que en varias nacionales y en una autovía se empiecen a cobrar los respectivos peajes por uso. Eso sí, por ahora, algunos vehículos estarán exentos de abonar las tasas.
Según detalla el diario El Correo, estas vías van a ser la BI-625 entre Basauri y Llodio, la N-240 que une el valle de Arratia y el puerto de Barazar y, además, un tramo de la N-636 entre Durango y la muga con Guipúzcoa. Un tramo existente entre Basurto y Haya de la A-8 también será de pago y se sumará el corredor del Txoreirri, entre Tontegi y Erlentexes.
Las estimaciones son descongestionar algunas de las principales vías gratuitas y trasladar parte del tráfico pesado a la AP-68, lo que reduciría en un 10% los accidentes y en un 13% la contaminación. Los peajes de la BI-625 y en la N-240 empezarán a funcionar (o eso se espera) a finales de 2022 y el resto irá instalando todo lo necesario para cobrar ya a partir de 2023.
Por el momento, solo la circulación de vehículos pesados estará condicionada al pago del peaje en estas nuevas carreteras vascas. De momento, no se conoce el importe que tendrán que asumir camiones y otros vehículos que entran dentro de esta categoría, a la espera de que todo el sistema empiece a funcionar.
En el caso de la autovía Deskarga, todos los vehículos, desde camiones a turismos, deben pagar el peaje por recorrer esta carretera de alta capacidad. Los únicos exentos de abonar el peaje de circulación son las motocicletas, al igual que vehículos de emergencia o trabajadores de la propia vía.