Reino Unido está asfixiada por la ola de calor, al igual que gran parte de Europa. Uno de los sucesos ocurridos en las últimas horas demuestra que las mascotas, al igual que las personas, tienen el riesgo de sufrir un golpe de calor por las altas temperaturas. De hecho, cada vez es más común en una ciudad no acostumbrada a las altas temperaturas, que la policía tenga que intervenir para salvar la vida de perros que habían sido dejados por sus dueños, como siempre, en el interior de vehículos.
Lo que las autoridades alertan a los ciudadanos es que aunque la temperatura fuera de los vehículos sea de 30 grados, dentro ya llegan a 47ºC., algo que puede ser mortal para sus mascotas. Así que ante el aumento de rescates de perros, las autoridades han advertido a dueños de mascotas.
Según un estudio elaborado por la Sociedad Española de Atención al Paciente Crítico (Seapc) y la empresa tecnológica enfocada en la seguridad vial infantil Rivekids, el interior de un coche puede alcanzar los 50 grados centígrados si se deja al sol durante una hora en verano. Por eso, ambas firmas han alertado de que dejar a un bebé, a un niño pequeño o a una mascota durante una hora en el interior de un coche sin refrigeración, con 31 grados en el exterior, podría acabar con su vida, al sufrir un golpe de calor, ya que el vehículo habría alcanzado entre los 50 y 60 grados.
Los perros, así como los gatos son mucho más sensibles que nosotros al calor y tener que soportar altas temperaturas puede ser muy peligroso para nuestros animales.
Los efectos de un golpe de calor pueden ser temporales o permanentes. E incluso, se puede producir la muerte del animal en tan solo 15 minutos de la exposición del animal al calor extremo. Aunque se estabilice el perro, es posible que este pueda presentar secuelas días o semanas más tarde de sufrir el incidente.
Algunos de los primeros síntomas que aparecerán en las mascotas si están sufriendo un golpe de calor serán: Respiración muy rápida y forzada, dificultad de movimiento y tambaleo, alteración de la salivación y lengua y mucosas azules. Por lo tanto, si su animal presenta estos síntomas, acuda de inmediato a su veterinario, ya que el animal puede estar en situación grave.