Cientos de maletas acumuladas en los aeropuertos. Es la consecuencia según los sindicatos de la falta de personal y del 'overbooking', que afecta ya al 20% de los viajeros. Equipajes que, advierten, podrían a empezar a extraviarse en aeropuertos como el de El Prat, en Barcelona.
El incremento del tráfico aéreo previsto en los aeropuertos a lo largo de los próximos días traerá aparejado numerosas cancelaciones, retrasos de vuelos, pérdidas de equipaje e incluso casos de 'overbooking', por ello es importante que los usuarios conozcan sus derechos ante estas situaciones, tal y como recuerdan desde Reclamación de Vuelos, empresa dedicada a la defensa del consumidor en materia aérea.
En el verano de 2022 se espera una especialmente alta afluencia en los aeropuertos debido al fin de las restricciones. Frente a una alta demanda, un vuelo puede sufrir retrasos o cancelaciones por multitud de motivos y, si no son por causa de fuerza mayor, como una meteorología adversa o una huelga de controladores, los usuarios tienen derecho a una indemnización por retraso o cancelación de entre 250 a 600 euros, que varía en función de la distancia de vuelo.
Además, se pueden reclamar a la aerolínea los gastos en los que se incurra o se deje de disfrutar por el retraso o la cancelación; e incluso una indemnización por los daños y perjuicios ocasionados por el retraso o cancelación si se puede demostrar el alcance de ese daño. Por otra parte, es posible pedir un reembolso del billete comprado en determinadas circunstancias. En el caso de una cancelación, se podrá solicitar de manera gratuita la reubicación en otro vuelo con el mismo destino, o si se decide sacar un nuevo billete, pedir que se reembolse el valor de la reserva de mayor importe.
Para poder reclamar un retraso de vuelos, es necesario que este haya sido superior a tres horas, mientras que si el vuelo ha sido cancelado es importante que el aviso de cancelación se haya producido con menos de 14 días de antelación. Aunque no es habitual, es posible que los usuarios lleguen a la puerta de embarque con toda su documentación en orden y se encuentren con un mensaje del personal de la compañía aérea informándole de que el vuelo está completo y no es posible embarcar.
Esto ocurre cuando las compañías venden billetes por encima de la capacidad de pasajeros del avión, en previsión de que algunos pasajeros puedan cancelar el viaje y así asegurarse tener el mínimo número de asientos vacíos para maximizar la rentabilidad. Sin embargo, si no hay ninguna cancelación, varios usuarios podrían tener el mismo asiento asignado.
Ante esta realidad, el pasajero puede pedir el reembolso del vuelo, un vuelo alternativo que le lleve a su destino lo antes posible o directamente una indemnización en función de la distancia del viaje, al igual que en el caso de una cancelación o un retraso.
Aunque finalmente se llegue a tiempo al destino, es posible que el equipaje de los usuarios se pierda o sufra algún desperfecto. En estos casos, el importe de la indemnización correspondiente por la pérdida de equipaje varía en función de los días que el equipaje ha estado perdido, su valor en caso de no recuperarlo y los daños y perjuicios que haya causado la pérdida.
Sin embargo, de cara a gestionar este tipo de reclamaciones, es importante que la persona afectada rellene un documento PIR en el aeropuerto para dejar constancia de la fecha y tipo de incidencia, lo cual servirá para solicitar la indemnización posteriormente. Es muy importante recordar que se tiene que cumplimentar un documento PIR por maleta y pasajero.
Al pasajero le corresponde una indemnización máxima de 67,33 euros por cada día que el equipaje ha estado perdido hasta un límite de 21 días en el que se da el equipaje por perdido de forma definitiva, con una indemnización total de 1.414 euros. Además, puede recibir una indemnización del importe de la maleta, ropa, compras realizadas, y todo ello con las correspondientes facturas para acreditar el valor de lo perdido.