En el juicio contra Jorge Ignacio Palma, el presunto asesino de Marta Calvo y otras dos mujeres, hoy van a declarar testigos, policías y médicos, por la muerte de Arliene Ramos, la que sería la primera víctima mortal. Ayer en el juzgado se escuchó también el testimonio de una chica con la que contactó tres días después de estar con Marta Calvo y el de otra que estuvo a punto de morir en una fiesta blanca.
Jorge Ignacio Palma declaró ante la policía haber descuartizado –que no matado- a Marta Calvo. Solo tres días después de eso, el acusado quedó con otra joven que ha sido testigo en el juicio.
Jorge Ignacio Palma “acababa de deshacerse del cuerpo de Marta Calvo” –que nunca ha dicho dónde está- cuando quedó con otra de sus víctimas, ha señalado uno de los abogados de las acusaciones.
En la sesión del juicio de este miércoles también fue el turno de una chica, Irene, de 18 años, que sobrevivió a una cita sexual con Jorge Ignacio Palma. La víctima más joven de todas ha explicado muy bien qué sucedió.
La mujer se sorprendió por la enorme cantidad de cocaína que llevaba, una droga que él no tomaba. Intentó metérsela por los genitales pero ella no le dejó. Así que se la dio por la boca. Era “muy persistente, muy violento, muy brusco…Y sí, con la mano, con el dedo, pero él no toma nada. Y en la boca también te pone”.
Después le dio de beber una copa. Ahí fue cuando la chica perdió el conocimiento. “Cuando me desperté no sabía ni quién era él, ni dónde estaba ni nada. Me desperté aturdida. Me vi un poco, en plan, acorralada”, ha narrado en el juzgado.
Esta casi adolescente intentó olvidar lo sucedido durante un año, hasta que lo vio en la televisión y como otras víctimas supervivientes de Jorge Ignacio decidió que debía contarlo.
“Cuando le vi la cara, me volvió todo esto y… ¡buah! Necesito contar que este tío ya lo había hecho antes y que iba sabiendo lo que había. Que no fue un accidente”.
Jorge Ignacio Palma se enfrenta a 130 años de cárcel por 11 delitos de abuso sexual- tres de ellos como medio necesario para un delito de homicidio y siete para un delito de lesiones--; y un delito contra la salud pública.
El acusado mató, presuntamente, a Marta Calvo, Arliene Ramos y Lady Marcela Vargas. Otras ocho mujeres lograron sobrevivir. Muchas de ellas han declarado en el juicio con el único objetivo de que cumpla su castigo y no lo vuelva a hacer.