Serum, el mayor fabricante de vacunas del mundo por volumen, fundado en la India, ha iniciado una producción en masa de una vacuna para el coronavirus, desarrollada por la Universidad de Oxford, que aún está en fase de prueba.
Cyrus Poonawalla, presidente de la compañía, conocido como 'el rey de las vacunas' de la India, espera que Serum produzca 40 millones de dosis de la vacuna -llamada ChAdOX1- para septiembre, fecha límite en la que Oxford pretende completar los ensayos clínicos en humanos.
Según el proyecto, se inyectará la vacuna a alrededor de 1 100 personas del Reino Unido como parte de un ensayo -financiado por el Gobierno- que se ha iniciado después de obtener resultados prometedores de pruebas en animales, según informa la institución. Poonawalla planea establecer una planta del centro de Serum dedicada a la vacuna en la ciudad de Pune, en el oeste de India.
Adar, CEO de Serum, hijo de Poonawalla, ha insinuado a los medios locales indios que la empresa no patentaría ninguna vacuna, sino que la mantendrá asequible. "Estamos comenzando a fabricar de inmediato la vacuna para que no haya escasez una vez se realicen los ensayos y la vacuna pueda llegar a un gran número de personas lo antes posible", comentó. Serum produce 1 500 millones de dosis de vacunas al año para una variedad de enfermedades, incluidas la neumonía, la tuberculosis, el sarampión o la meningitis, y las exporta a más de 150 países.
El Consejo Indio de Investigación Médica, ICMR, indicó que la vacuna Oxford fue la primera en la carrera para vencer a la COVID-19, y está monitoreando de cerca el progreso relacionado con ella. El doctor Suman Kanungo, epidemiólogo del ICMR, comentó que vale la pena correr el riesgo de producir ChAdOX1 en masa a pesar de que los ensayos clínicos acababan de comenzar, ya que puede ser una ventaja importante para garantizar el suministro de la vacuna.
Serum compite con otras cinco empresas indias y casi 100 compañías a nivel mundial en su intento de producir una vacuna eficaz contra el coronavirus. Sin embargo, los expertos han advertido en repetidas ocasiones que para encontrar una vacuna válida se necesitan años, no meses. Casi el 60% de las vacunas del mundo se producen en India y la industra se ve impulsada por los bajos costes de producción. La llegada de la vacuna se hace esperar.